Con baja participación popular, aunque sin datos oficiales confiables -al cierre de esta edición- se llevó adelante la elección de Constituyentes convocada por Nicolás Maduro, el presidente de Venezuela.
Como se preveía, lo que sobresalió fue el boicot activo de la oposición política, reunida en el MUD (Mesa de Unidad Democrática) y la violencia en las calles que generó, según se publicó en la prensa local, al menos nueve muertos.
Aunque se vio desde muy temprano numerosas filas para elegir los miembros del nuevo cuerpo de 545 asambleístas, que elaborarán una nueva Constitución y tendrán la potestad de disolver los poderes públicos actualmente constituidos, la afluencia de electores pareció exigua en Caracas y en las principales ciudades del país.
Desde la oposición se volvió a insistir en rechazar la reforma porque considera que dará paso a una "dictadura" e instó a sus partidarios a seguir protestando en las calles.
Aunque desde la Fiscalía se informó que hubo al menos ocho muertos, voceros opositores informaron que la cifra llegó a trece al final de día.
"El día de hoy se caracterizó por la abstención y la represión", dijo el presidente del parlamento, Julio Borges. "Teníamos prevista una concentración en Caracas y la represión fue de tal magnitud que impidió que la gente pudiera concentrarse", agregó.
Desde el MUD se informó que para apenas participó el 12% de los casi 20 millones de habilitados.
En Caracas, la fuerza pública usó gases lacrimógenos para repeler a los opositores que protestaron, aunque como señala la legislación vigente estaban prohibidas las manifestaciones de ese tipo en jornada electoral.
El hecho más luctuoso fue una explosión que hirió a siete policías que lanzaban gases lacrimógenos a manifestantes.
La comunidad internacional, por su parte, rechazó la propuesta oficial (ver aparte).
Maduro dijo que la constituyente le permitirá al país cambiar su economía para depender cada vez menos de los vaivenes de los precios internacionales del crudo.
 
Delcy Rodríguez, la ex canciller venezolana y candidata a constituyente, dijo que la nueva constitución es "la única salida inmediata que tenemos para resolver los problemas entre venezolanos, garantizar la paz y derrotar la violencia" y señaló que "cuando la derecha ganó el Parlamento en 2015 se dio un desequilibrio profundo, porque una de sus primeras acciones fue desconocer al chavismo. Ese desequilibrio lo va a reparar la Constituyente".
El gobernador y dirigente opositor Henrique Capriles dijo a su vez que "la oposición lo que quiere es cambios. Y no celebramos porque hoy lo que hemos tenido una brutal represión en todo el país".
"Han fallecido cerca de 15 personas en 18 estados en los que hubo protestas. En Mérida cinco fallecidos, Táchira siete, Sucre uno, Barquisimeto dos. Solamente en Táchira hay 400 heridos aproximadamente", dijo el político venezolano.
Denunció además que se suma "el allanamiento a la casa del alcalde de Ejido, Omar Lares, en Mérida, de la que un grupo comando presuntamente se llevó a su hijo secuestrado".
Capriles dijo también que la Mesa de la Unidad dará a conocer las acciones que llevarán a cabo en los siguientes días porque "esta jornada ya terminó pero esta lucha por la democracia sigue".
El dirigente Leopoldo López, recientemente beneficiado con arresto domiciliario, llamó también a la comunidad internacional a desconocer la Asamblea.
El candidato a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Héctor Rodríguez, en cambio, se mostró satisfecho y felicitó a los venezolanos y aseguró que fue "una de las más grandes participaciones que ha habido en un proceso electoral".

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