Diciembre es un mes de paz. La época del año donde las tensiones se aplacan y se concilian para terminar en la mesa familiar de nochebuena. Pero lamentablemente no ocurre así. Este jueves se vivió, en las calles de Buenos Aires y el recinto del Congreso de la Nación, una situación donde la realidad argentina y las cuestiones sociales provocaron el fin de una sesión especial.
 
Tal como ocurrió en el 2001, cuando una crisis terminó con el gobierno de De la Rúa, el mes de diciembre se convirtió en un mes convulso para nuestro país. Un periodo que no se exenta de las tensiones sociales, alcanzó un pico vergonzante y preocupante. La realidad argentina multiplicó los impactos políticos y terminó una sesión especial escandalosa que trataría la reforma previsional.
 
Escuchá la columna completa de Nicolás Ángel Florio