En medio de la tormenta, adjetivo significante que utiliza el presidente para aludir sin nombre a la crisis cambiaria y sus consecuencias Macri se zambulló en otra turbulencia política.
 
Como que gobernar no es solo gestionar la economía, el Gobierno lanzó un proyecto para la reformulación del rol de las Fuerzas Armadas que encendió una polémica con las organizaciones de Derechos Humanos y fuerza sociales y políticas particularmente progresistas.
 
El papel del Ejército, la Armada y Aeronáutica desde 1930 hasta 1983 se desnaturalizó como instituciones de la Republica porque se usurpaba el poder y actuaba como el brazo ejecutor del terrorismo de estado contra la guerrilla urbana causando miles de torturados, muertos y desaparecidos cuyos represores fueron juzgados y purgan cárcel.
 
Este pasado reciente fue consentido por una sociedad harta de los excesos políticos pero indolente e indiferente a las atrocidades que se cometían en la última dictadura.
 
Las fuerzas armadas de hoy son de otra generación, tienen distinta formación y están subordinadas al orden institucional.
 
Hoy necesitan otro rol acorde a un país sin hipótesis de conflicto exterior pero expuesto a otras agresiones externas, como el terrorismo, el avance del narcotráfico, el contrabando y el ciberdelito.
 
Esto es lo que ha propuesto Macri. Cuál es tu opinión.