Tenemos por un lado la nueva AF9, el televisor OLED que sucede a la A1 y por otro la ZF9, su nuevo televisor con panel LCD que sustituye a la ZD9. Hemos tenido la ocasión de conocerlas durante su presentación en Nueva York y aquí os traemos nuestra toma de contacto con las Sony Bravia Master Series AF9 y ZF9.
No ha sido una revolución dentro de la marca como fue la llegada de la propia A1, pero tampoco estamos ante un modelo continuista como la AF8 presentada a principios de año. Las Sony AF9 y ZF9 incorporan los últimos paneles disponibles, añaden su nuevo procesador X1 Ultimate mostrado en el CES 2018 y se incorporan diversas tecnologías para mejorar el contraste, los ángulos de visión así como otros apartados tan importantes como el software o el sonido. Dos modelos que representan el tope de gama de Sony para 2018 en televisores y nos han dado un buen sabor de boca. Aquí os dejamos con nuestras primeras impresiones.
OLED AF9 o LCD ZF9: igual de espectaculares pese a la tecnología del panel
Hemos podido probar los nuevos televisores de Sony durante una mañana. Por un lado estaban expuestas en una sala con una iluminación oscura, donde los colores de la OLED se disfrutan y el brillo del modelo LCD es muy llamativo. Por otro, Sony nos hizo varias demostraciones pero donde no estaba permitido hacer fotos. Tenemos por tanto una primera toma de contacto donde nos hacemos una idea de qué ofrecen pero hasta que no las probemos en condiciones normales no podremos discernir hasta qué punto han dado un salto real frente a anteriores modelos.
Dicho esto, las nuevas Master Series ofrecen una calidad de imagen sobresaliente. El OLED AF9 y el LCD ZF9 (A9F y Z9F en EEUU) se convierten de inmediato en los modelos de gama más alta de Sony para 2018 y sin duda en dos de los televisores más completos del mercado. Estarán disponibles para finales de año pero todavía no tenemos precios oficiales. Tampoco hay dudas que su precio será muy elevado.
El modelo AF9 llega en 55 y 65 pulgadas, mientras que el ZF9 lo hace en 65 y 75 pulgadas. No hay confirmación de modelos más grandes por lo que parece que los últimos paneles OLED de 77 pulgadas se quedarán en LG.
La imagen de las Master Series impresiona. No estamos ante un salto enorme, pero sí dos televisiones que dan un paso adelante para intentar convertirse en los modelos OLED y LCD de referencia.
La Master Series AF9 es un televisor OLED con un diseño similar al de la A1. Tenemos una imagen que ocupa todo el frontal del televisor y la calidad es excelente. El modelo de este año mejora su imagen gracias al nuevo procesador X1 Ultimate, los nuevos paneles OLED y una nueva tecnología denominada Pixel Control Booster. Respecto a la A1 o la AF8, en esta AF9 he tenido la sensación que se ha mejorado el brillo, la nitidez es brutal (los vídeos de demostración también ayudan) y los colores son muy agradables a la vista. Si bien las LCD no pueden competir contra el OLED en contraste y homogeneidad, esta AF9 todavía sigue siendo inferior en luminosidad. Afortunadamente para los usuarios, las dos tecnologías están cada vez más cerca en sus puntos débiles.
De la OLED AF9 nos quedamos con una de las mejores representaciones del color que hemos visto. De la ZF9 nos llamó la atención el brillo, aunque la sala se prestaba a ello.
Al lado teníamos la Sony Master Series ZF9, un modelo con pantalla LCD que también añade el procesador X1 Ultimate. La anterior generación, la ZD9 era un televisor considerado durante mucho tiempo uno de los mejores LED del mercado gracias a su gran cantidad de zonas de retroiluminación. Habrá que ver cómo se comporta la ZF9, pero la sensación es que es por lo menos tan buena como aquella.
El mayor brillo de la ZF9 al lado de la OLED se apreciaba con facilidad pero ni de lejos alcanzamos los 10.000 nits prometidos que podría conseguirse con el X1 Ultimate. El prototipo de televisor que vimos en el CES 2018 proporcionaba una imagen más brillante, por lo que entendemos que Sony ya está trabajando en los modelos que llegarían el próximo año.
Procesador X1 Ultimate: la confirmación de un modelo que funciona
El panel no lo es todo. Sony fue una de las primeras compañías es apostar fuerte con el procesamiento de imagen en sus televisores. Cada dos años ofrecen un chipset nuevo y en estas Master Series estrenan el X1 Ultimate, con el doble de potencia respecto al X1 Extreme.
¿Para qué sirve el procesador? Se trata de una herramienta que utiliza la tele para analizar la imagen, compararla con diversos patrones y optimizarla para mejorar su contraste, nitidez y brillo. A más potencia de procesamiento, más realismo se consigue. ¿Y cómo se determina qué es la realidad y cuál es una imagen imprecisa? Sony se basa en sus BVM X300 V2, unos monitores profesionales OLED que utilizan los propios directores de cine al grabar. En las diversas pruebas se compararon los televisores Master Series y otros modelos junto a la imagen del monitor y simplemente deciros que todavía quedan varios años para que esa calidad original llegue a nuestros salones.
Sony no pelea por conseguir el punto más brillante u oscuro. El objetivo de su procesador X1 Ultimate es mejorar el detalle y conseguir los degradados más naturales.
En las distintas comparativas tuvimos la oportunidad de ver las diferencias entre un televisor con el X1 Ultimate activo y sin él. También ver su efectividad respecto a otros modelos de la competencia. La AF9 quizás no tenga el pico de brillo más alto en una OLED, mientras que la ZF9 no alcanza un contraste tan pronunciado ni negros totalmente profundos, pero no es la lucha en la que Sony quiere participar.
La efectividad del procesador X1 Ultimate se nota en una nitidez excelente, degradados suaves y zonas no quemadas. En la comparativa ofrecida por Sony con los televisores calibrados tal y como vienen en la caja, la OLED AF9 destacaba por ejemplo en no oscurecer absolutamente todas las zonas o la ZF9 en ofrecer un buen detalle en zonas difíciles como un sol. No sabemos hasta qué punto hay un salto respecto a la anterior generación, pero sí nos llevamos una impresión de un televisor con una fidelidad excelente, aunque quizás no tan llamativa en cuanto a los puntos extremos de brillo y contraste.
Renovando un diseño y sonido característico
La Sony Master Series AF9 ha modificado uno de sus elementos más característicos. El primer modelo, la A1, añadía un stand trasero donde teníamos el subwoofer pero el sonido salía de la propia pantalla. Ahora con la AF9 se nos presenta el sistema Acoustic Surface+, una evolución que ofrece un sonido similar pero donde tenemos tres activadores en vez de dos y se ha mejorado la construcción interna.
En el modelo de este año pasamos de 50W a 98W, con tres activadores. El principal está situado en el centro y los otros dos cada uno a un lado, lo que nos da un sonido 3.2. Este sistema además permite a la tele actuar como el centro de un sistema Home Cinema. Es decir, podremos utilizar el sonido de la AF9 para las voces y un amplificador conectado para mejorar el efecto envolvente y la contundencia.
La parte trasera de la OLED AF9 cambia de aspecto, pero mantiene su característico diseño. En el modelo de este año se ha mejorado el sonido con un sistema 3.2 de 98W, el doble que en la A1.
Los medios y agudos se escuchan con un gran nivel de fidelidad en la Master Series AF9. Aunque no tuve la oportunidad de escuchar una demostración con explosiones y sonidos más contundentes. Tampoco pudimos probar el sonido de la ZF9.
La AF9 sigue teniendo un diseño con una pata trasera que se diferencia de la mayoría de televisores. Tiene sin duda un aspecto vanguardista pero para muchos usuarios puede ser un problema ya que no invita a colgarla a la pared. Este año la pata trasera no ocupa tanto de fondo pero sí es más gruesa.
El mecanismo es el mismo pero en vez de un subwoofer trasero ahora tenemos dos situados a los lados, por lo que el sonido no iría hacia la pared en caso de colgarla sino que es más lateral. Pese a eso, se mantiene el modo sonido de pared a través del software de la tele. Sigue sin ser un televisor pensado para colgarlo, pero al menos no afectará tanto.
El modelo top LCD mejora los ángulos de visión y cambia su diseño
El modelo ZF9 cambia bastante respecto a la anterior ZD9. En vez de una pata central y bordes dorados, tenemos una tele con dos patas a los laterales, un cuerpo más estrecho y una estética que nos recuerda directamente a la XF90. La sensación que tengo es que se ha perdido parte de la estética premium y estamos ante un modelo más tradicional. La razón que nos da
Sony es que se apuesta por las dos patas para encajar con la barra de sonido.
Sony no ha confirmado el nivel de nits ni las zonas que posee el nuevo sistema de retroiluminación de la ZF9.
La calidad de imagen de esta Sony ZF9 era también excelente, digno de una tele de su nivel. Como decimos, el nivel de brillo sorprende y pocos televisores ofrecen este nivel. Sony no da datos técnicos del nivel de nits ni las zonas de retroiluminación, pero sí nos confirma que no utiliza el sistema Backlight MasterDrive y se ha apostado por un panel de tipo VA.
Este tipo de paneles ofrecen un contraste muy bueno en comparación con las IPS, sin embargo se reducen sus ángulos de visión. Para compensarlo se apuesta por un sistema que han llamado X-wide Angle. En las pruebas resultó bastante efectivo y lo cierto es que pese a estar lejos de las OLED, sí nos parecieron muy acertados.
Más allá del brillo o el contraste, lo que nos ha llamado la atención es su sistema 'X-Wide Angle' que nos ofrece unos ángulos de visión excelentes para un panel de su tipo.
Además de la mejora de los ángulos, también se incorpora el sistema X-Motion Clarity para conseguir movimientos más suaves en las escenas más rápidas. Es un sistema que ya vimos en la XF90 y aquí se repite.
Con la ZF9 tenemos una sensación extraña. Estamos ante un televisor que para quien busque imágenes brillantes, colores vivos y tonos realistas es una opción a tener muy en cuenta. El OLED queda lejos de esta combinación de gama alta que solo las LED pueden alcanzar, sin embargo echamos en falta una mejora significativa de los negros y el contraste. Todavía es pronto para decirlo, pero del mismo modo que con la ZD9 en su día o la nueva QLED Q9FN sí hemos visto avances claros en esta dirección, con la ZF9 lo que tenemos es un nivel parecido y donde sí notamos una mejoría es en la homogeneidad y los ángulos de visión.
Android TV 8.0 y Google Assistant
Los dos modelos de la Master Series llegarán con Android TV 8.0 Oreo. Pese a que el sistema operativo de Google lleva mucho tiempo en el mercado, lo cierto es que ha sido difícil de ver en acción. El diseño de esta nueva versión está más centrado en el contenido y por ejemplo tendremos accesos directos a series, películas y vídeos. También se ha mejorado la integración con Google Assistant.
No pudimos probar la nueva versión de Android durante tiempo suficiente, pero sí se confirman nuevos procesadores internos de MediaTek. Es pronto para decirlo, pero la fluidez de los menús debería verse mejorada. Pese a eso, creemos que Sony todavía tiene margen de mejora para llegar al nivel de Samsung o LG en el software.
Sony corrige algunos puntos donde la competencia les había adelantado: en las Master Series se ha actualizado a Android TV 8.0, se mejora el procesador interno para mover más rápidos los menús y todos los HDMI, no solo dos, soportan 4K/60fps.
El mando de las Master Series es prácticamente el mismo que incorporan sus televisores de gama alta. Es otro punto donde Sony es demasiado conservadora y se hubiera agradecido un cambio para adaptarse a los nuevos tiempos. Únicamente notamos la sustitución del botón de voz por el logo de Google Assistant.
Muchos usuarios esperaban la conexión HDMI 2.1, pero las Sony Master Series no lo incorporan. No es de extrañar. Esa certificación está pensada para televisores con mayores resoluciones y tasas de refresco, una serie de características que llegarán en la siguiente generación de televisores. Estas Master Series son la consolidación de los televisores 4K HDR, pero no estamos todavía ante modelos 8K, 12 bits ni lo que acabe llegando dentro de un tiempo. No debería preocupar a los usuarios ya que varias de las funciones del HDMI 2.1 puede aplicarse a los televisores con HDMI 2.0.
Sí tenemos cuatro puertos HDMI compatibles con 4K/60fps, una mejora respecto a modelos anteriores donde solo teníamos dos. Además de eso, según podemos leer en FlatPanelsHD, estos puertos son compatibles con HDMI eARC. Esto permitirá tener Dolby Atmos a través del HDMI y un aparato externo ('pass-through'), no directamente ya que la tele no es compatible.
Calibración de fábrica y alianza con Netflix
Una de las sorpresas de la presentación de los nuevos televisores de Sony es la introducción del 'Netflix Calibrated Mode'. No lo hemos podido probar más allá de comprobar que sí se encuentra en los menús de la televisión. Se trata de una alianza entre Sony y Netflix para adaptar la imagen de las series a cómo los creadores quieren que se muestre.
De momento se ha promocionado como una alianza en exclusiva, pero no sería extraño que para más adelante otras marcas llegaran a acuerdos similares con Netflix. Este modo de imagen estará disponible a través de la aplicación de Netflix. Es decir, no se activará desde los ajustes de Android TV aunque sí aparecerá ahí una opción de "Auto picture mode", para que la tele entienda que si activamos el modo de Netflix se ajuste a él y no al que tengamos marcado.
No hemos logrado conocer exactamente qué tipo de calibración y criterios se establecen para lograr este modo para Netflix. La idea es adaptarse a la visión particular de los creadores de las series, pero el modo se aplicará a todo el contenido de Netflix, desde las series propias hasta el contenido de terceros.
Además del soporte a Dolby Vision de fábrica, Sony anuncia que todas las Master Series estarán calibradas de fábrica. El objetivo es que los colores y el brillo de cada punto se asemejen lo máximo posible al ideal y la imagen sea lo más uniforme posible. Siguiendo esta estrategia, Sony anuncia su colaboración con CaiMAN, líderes en calibración de pantallas que eso sí ya trabajan desde hace tiempo con otros fabricantes como Panasonic, Samsung o LG.
Todas las Sony Master Series vendrán calibradas de origen, lo que garantiza que la reproducción de color será lo más ajustada posible. En función del contenido y los gustos del consumidor, se podrán aplicar después diversos modos de imagen como el de Netflix.
La calibración de los televisores está pensada para aquellos usuarios avanzados que quieran ajustar la imagen a una visualización óptima concreta. Actualmente requiere de tiempo, conocimiento y material especial. Para facilitar esta tarea, CaiMAN dispone de varias herramientas más asequibles y rápidas a las que ahora se añade una aplicación de "CaiMAN para Bravia" que será descargable a través de la Google Play Store.
Las Sony Master Series también añaden un CMS ('Color Management System') para ajustar los colores de manera concreta en los modos profesional, que ahora pasarán a llamarse simplemente como 'Custom'. Como vemos, Sony ha dado una gran importancia a la calibración de la imagen y a los modos que más se ajustan a lo que los directores de contenido busquen ofrecer.
Sony siempre fiel a su estilo
Sony por fin nos ha mostrado sus cartas en televisores de gama alta para 2018. No estamos ante un cambio de paradigma pero sí dos modelos de televisor que representan la madurez del sector. No tenemos dudas que las Sony Master Series tendrán un precio muy elevado, algo lógico teniendo en cuenta que ofrecen de lo mejor en OLED y LCD. Su llegada está prevista para antes de final de año y habrá que ver la diferencia de precio que tendremos con la competencia para las fechas navideñas.
No tenemos datos de nits, ni de input lag ni de las zonas de retroiluminación en la ZF9. Para el fabricante japonés no son datos válidos para entender la calidad de imagen de un televisor. Ellos preferían hablar de procesadores y nivel de detalle, ahora además han hecho un esfuerzo por poner encima de la mesa los conceptos de modos de calibración e imagen. Se agradece esta filosofía que nos acerca en parte a cómo la industria mira a las televisiones, un sector donde el HDR juega un papel principal.
Las Sony Master Series son televisores de gama alta con una imagen excelente. Su precio será elevado sin ninguna duda, pero a cambio tenemos un gran brillo, una nitidez espectacular y la promesa de Sony de ofrecer la imagen más cercana a lo que pretenden los directores de cine o los creadores de series como las de Netflix.
La Sony Master Series AF9 es un televisor OLED impresionante. Tiene un diseño muy característico, el sonido se ha mejorado, los colores son más vivos todavía y el brillo empieza a ser suficiente, sobre todo teniendo en cuenta que es una OLED. Personalmente si tuviera que quedarme con una de las dos iría a por la Master Series OLED AF9. Es un televisor redondo, con una imagen muy precisa y la que creo que mejor aguantará el paso del tiempo. Hasta qué punto merece la pena por su precio es algo que todavía es pronto para discutir.
La Master Series ZF9 coincide con lo que nos decían desde Sony a principios de año. La tecnología LED todavía tiene margen de mejora y es una opción muy válida para quienes busquen la imagen más llamativa y brillante. Sin embargo tengo una sensación agridulce. El diseño no me ha parecido tan acertado como el modelo anterior y de la misma manera que la ZD9 fue un modelo LED rompedor para la época, esta ZF9 me parece una continuación más conservadora.
Habrá que esperar a los análisis para hacernos una mejor idea de hasta qué punto es un salto frente a generaciones anteriores de Sony u otros modelos top como las Samsung QLED Q9FN, LG OLED E8/C8 o Panasonic EZ1000/FZ950, pero estas Sony Master Series, sobre todo el modelo OLED AF9, apuntan a ser televisores para quienes busquen la imagen más precisa del momento.