La tormenta tropical se convirtió en huracán este domingo mañana por la mañana, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. Impactaría el jueves o viernes, según los pronósticos.
La tormenta tropical Florence, que se aproxima a la costa este de Estados Unidos, se convertiría en un huracán "extremadamente peligroso" el domingo y el lunes, según advirtió el Centro Nacional de Huracanes (NHC), que hizo un llamado de vigilancia.
"Prevemos que Florence se refuerce rápidamente y se convierta en un huracán mayor de aquí al lunes, y debería permanecer como un huracán extremadamente peligroso hasta el martes", anunció el NHC en un boletín difundido hacia las 21 GMT este domingo.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, declaró el estado de emergencia el viernes, para enfrentar las posibles consecuencias del paso de Florence, en tanto Carolina del Sur tomó la misma decisión el sábado.
La Armada estadounidense, por su parte, ordenó que todos sus barcos abandonaran el área de Hampton Roads, ante el paso del huracán.
A las 05:00 horas (hora del este), Florence tenía vientos máximos sostenidos de un estimado de 110 kilómetros por hora (70 millas por hora), indicó el centro de huracanes. Su centro estaba a unos 1.235 kilómetros (765 millas) al sureste de Bermuda y se dirigía al oeste a 9 km/h (6 mph).
Henry McMaster, gobernador de Carolina del Sur, enfatizó que no hay forma de saber aun cuándo y dónde tocará tierra, o cuándo se ordenarán las evacuaciones.
Por otra parte, se formó otra tormenta tropical en el oeste del océano Atlántico.
El Centro Nacional de Huracanes dijo el sábado por la noche que la tormenta tropical Isaac estaba a unos 2.450 kilómetros (1.580 millas) al este de las islas Windward. Tenía vientos máximos sostenidos de 85 km/h (50 mph) y avanzaba al oeste a 13 km/h (8 mph).