El huracán Florence, que hoy avanza con vientos sostenidos de más de 220 kilómetros por hora hacia la costa este de Estados Unidos, provocó la evacuación de al menos un millón de personas en Carolina del Sur y de unos 250 mil en Virginia.
El Centro Nacional de Huracanes (CNH, con sede en Miami) emitió hoy un alerta de ciclón y fuertes marejadas para zonas de las costas de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia. Si bien los vientos máximos sostenidos de Florence perdieron algo de intensidad, el CNH pronostica que sería un "gran huracán extremadamente peligroso cuando toque tierra".
"Florence es un huracán categoría 4 en la escala de intensidad Saffir-Simpson (de un máximo de 5)", subrayaron los expertos. "Se espera que comience a fortalecerse de nuevo hoy y que continúe con esa tendencia", añadieron.
Un huracán de esa categoría puede causar daños catastróficos derribando estructuras que no estén fuertemente construidas, árboles y el tendido eléctrico. Además, probablemente ocasionará daños severos a los techos y paredes de las casas, fuertes marejadas e inundaciones que pueden poner en peligro la vida de las personas, de acuerdo con el CNH.
"La combinación de oleaje peligroso y la marea causará que las áreas normalmente secas cercanas a la costa se inunden al aumentar las aguas que se mueven hacia el interior desde la costa", alertó el boletín. Se emitieron alertas de huracán y de marejada ciclónica desde Edisto Beach, Carolina del Sur hacia el norte hasta la frontera entre Carolina del Norte y Virginia, incluidos Pamlico y Albemarle.
Florence se encontraba este mediodía local a 625 kilómetros al sur de las Bermudas y a 1.455 kilómetros al al este sureste de Cabo Fear en Carolina del Norte. Miles de personas, alrededor de un millón 300 mil, tienen orden de evacuar en Carolina del Norte, Carolina del Sur y algunas zonas de Virginia. Los residentes comenzaron a marcharse en masa a medida que el huracán se aproxima a la costa atlántica estadounidense, donde se espera que toque tierra entre jueves y viernes próximo.
"Esta es una de las peores tormentas que azotará la costa este en muchos años", tuiteó el presidente Donald Trump. "¡Prepárense, tengan cuidado y estén seguros!", advirtió.
El gobernador de Carolina del Sur, Henry McMaster, ordenó la evacuación de un millón de residentes antes del posible arribo de Florence el jueves. Decenas de escuelas de los 46 condados del estado permanecen cerradas desde hoy. "Esto es un huracán de verdad", dijo el gobernador. "Las evacuaciones son inconvenientes, pero no queremos arriesgar una sola vida".
En tanto el gobernador de Virginia,Ralph Northam, ordenó la evacuación de 245 mil residentes de zonas bajas de la costa. Al igual que ocurre en este tipo de eventos meteorológicos, los residentes agotaron víveres, agua embotellada, generadores, tablas de madera y herramientas. Las banderas rojas ya fueron colocadas en playas, advirtiéndoles a las personas que no entren al agua. En Charleston, en la costa de Carolina del Sur, las autoridades municipales les ofrecieron sacos de arena a los residentes. La alcaldesa de Myrtle Beach, Brenda Bethune, llamó a la ciudadanía a proteger sus viviendas.