La información fue oficializada este jueves en el sitio web de la Armada.
Cinco nuevos contactos. Eso es lo que hallaron los vehículos submarinos autónomos que van y vienen del buque Seabed Constructor, la nave civil más avanzada del mundo que zarpó desde Comodoro Rivadavia para buscar el submarino ARA San Juan. La información fue oficializada este jueves en el sitio web de la Armada.
Según la Armada, la empresa estadounidense Ocean Infinity, que opera el buque, descartó que otros dos contactos que investigaba pertenecieran al submarino que partió desde Mar del Plata con 44 tripulantes y cuyo paradero permanece desconocido. Uno de esos contactos era una formación geológica y el otro era un buque pesquero.
Este miércoles, los vehículos autónomos detectaron un total de nueve contactos, pero sólo cinco presentan probabilidades de ser compatibles con el ARA San Juan, por lo que se profundizará su investigación. Para eso, trabajarán cuatro de las unidades de inmersión robóticas que fueron llevadas en el buque nórdico.
En total, el Seabed Constructor cuenta con ocho mini-submarinos autónomos que se sumergen hasta los 6.000 metros de profundidad y escanean el fondo marino. El buque es de origen noruego, tiene cuatro años de antigüedad, y la capacidad de trasladar hasta 102 personas: desde Comodoro Rivadavia, para presenciar la búsqueda, viajaron cuatro familiares de los tripulantes del San Juan.
Ocean Infinity se impuso en una licitación ante otra empresa también estadounidense: estipuló un presupuesto de 7,5 millones de dólares que sólo cobrará si encuentra el submarino argentino. Su plan de búsqueda es de no menos de 60 días y no más de 120. La firma también fue parte de los rastrillajes que buscaron -sin éxito- los restos del avión de Malaysia Airlines que desapareció en el océano Índico en 2014.
El ARA San Juan se contactó por última vez el 15 de noviembre a la mañana desde la zona del golfo de San Jorge.