Vecinos y familiares despidieron los restos de Sheila Alejandra Ayala, la nena de 10 años asesinada por sus tíos. La menor fue enterrada en el cementerio de la localidad de San Miguel, en donde vivía.
"No tengo palabras para lo que hicieron estas bestias", expresó uno de los vecinos de la zona, y se sumó a las quejas y al enojo de los demás residentes del área que conocía a Sheila. “No se merecía esto la chiquita, porque es un angelito. Ojalá Dios bendiga a todos los chicos que se merecen vivir, nada más", dijo un vecino que fue acompañado de su nieta.
Mientras tanto, Leonela Ayala y Fabián González Rojas, los tíos de la menor, serán indagados por el fiscal de San Martín, Gustavo Carracedo. El jueves, cuando apareció el cuerpo de la nena, Leonela había confesado el crimen. “Tomamos droga y alcohol y no sabemos cómo llegamos a eso”, declaró. Sin embargo, sus palabras carecen de validez jurídica, ya que no se hicieron dentro de la indagatoria formal, una cuestión que se espera solucionar en el transcurso del día.
Sheila desapareció el domingo 14 de octubre, cuando jugaba en la puerta de su casa con otra nena. Cuatro días después fue encontrada desnuda dentro de una bolsa de basura, entre medio de dos medianeras, ubicadas a metras de su casa.
Según pudieron establecer los peritos, la nena presentaba "surco de ahorcadura de 3 cm de ancho" en su cuello y "fracturas no vitales de los arcos costales anteriores derecho e izquierdo".
"El sábado la hizo luchar como gallo de riña con otra nena de 10 años por dinero. Era una nena que no se metía con nadie, pero la obligaban", dijo Marta, bisabuela de Sheila, al referirse a Juan Carlos, padre de la víctima y avivo la polémica en torno a la familia.