“La Argentina se ha replegado muchísimo en el mercado internacional. Hoy estamos exportando un porcentaje históricamente casi nunca visto. Habría que remontarse a la crisis de la aftosa de 2001/2002 para encontrar valores tan bajos. Es un momento donde la demanda mundial está muy buena, donde nuestros vecinos están disfrutándola, y los precios están muy por encima de los de aquella época, diría que más del doble”, señaló a “Siempre que llovió…, paró” Miguel Gorelik, director del novedoso portal Valor Carne.

Consultado sobre las razones para esta situación, el analista consideró que “esto se explica por la política intervencionista y regulatoria del Gobierno, que hace que las exportaciones sean una pesadilla en lugar de algo atractivo para las empresas. El mejor ejemplo de esto es el incumplimiento constante y sistemático de la Cuota Hilton, que siempre ha sido la joya de las exportaciones argentinas de carne".

Y agrego: "Mientras Brasil y Paraguay están teniendo un precio del novillo de US$3 por kilo en gancho, la Argentina, por el tipo de cambio que tiene, por las retenciones y por el efecto de la “barata” que hay que cumplimentar para poder exportar (venta interna obligada en valores muy bajos), está con un precio arriba de los US$ 3,7 para el exportador. Al tiempo que cuando el productor vende y quiere transformar eso en dólares, está recibiendo más o menos la mitad, US$ 1,7. Entonces, esta fuerte distorsión que existe en el mercado hace que la Argentina no pueda figurar ni siquiera entre los primeros 10 exportadores mundiales. La Argentina hoy está exportando el 6%/7% de la carne que produce, cuando los promedios históricos están entre el 20% y el 25%”, destacó.

Respecto a las perspectivas mundiales, Gorelik explicó que “Todos los analistas coinciden en que de acá a largo plazo (2030/2050), habrá una cantidad muy grande de gente en el mundo, en particular en Asia, pero también en otros países en desarrollo, que van a empezar a comer más carne bovina de lo que ha sido históricamente. Esta es una demanda que en el futuro van a poder cubrir pocos países con la habilidad y condiciones necesarias para producir carne vacuna. Se supone que los 4 países ganaderos del Mercosur están al tope de la lista de los que pueden ampliar su producción para cubrir esta demanda. Creo que en el futuro, cuando haya otra política económica dirigida al sector, la Argentina también va a estar dentro del pelotón de punta”, afirmó.

También explicó que “El mercado de la carne ha crecido a lo largo de esta década (a más de 9 millones de toneladas), y eso explica por qué los precios son más altos que los de hace 10 años atrás. China está dando un gran batacazo. Actualmente ha tenido un crecimiento en sus exportaciones muy relevante sobre las del año pasado. Todos los principales exportadores han tenido incrementos muy grandes con sus ventas a China. Para Uruguay, hoy China es el primer cliente, y para Brasil, con todo el volumen que maneja la exportación de ese país (1,5 millones de toneladas por año) es Hong Kong, porque a China no puede entrar directamente, y así ha superado a Rusia. Entonces, la perspectiva de exportación para este año es muy importante”, agregó.

Finalmente, Gorelik destacó que “La carne argentina, es un producto que tiene un prestigio que el mercado lo diferencia en precios. Todavía la Argentina mantiene ese diferencial de precio en los productos más caros con respecto a sus competidores inmediatos como Uruguay o Brasil. Pero también Argentina parte de costos más altos que sus competidores, por lo cual, necesita tener precios más altos que muchos mercados no pueden conseguir porque el producto es más commodities o indiferenciado. Además, a causa de esta situación, la mayor parte de los cortes tienen un precio más alto en el mercado interno que en el internacional. Entonces, el resultado de exportaciones muy bajas es completamente esperable en este marco”, finalizó.


Fuente: Infocampo.com.ar