El campo de entrenamiento, donde duermen los juveniles, se prendió fuego por razones que están bajo investigación
Una nueva tragedia envuelve a Brasil. El campo de entrenamiento del Flamengo, donde viven jóvenes de las divisiones menores, se incendió este viernes por la madrugada.
Las autoridades confirmaron que al menos diez personas murieron y tres resultaron heridas, de las cuales una está muy delicada. Por el momento, no se conocen las identidades de quienes perdieron la vida, aunque muchos tendrían entre 14 y 17 años.
Sí fueron identificados los sobrevivientes. Son Cauan Emanuel Gomes Nunes, de 14 años; Francisco Diogo Bento Alves, de 15; y Jonathan Cruz Ventura, también de 15, que es el que está más grave, según informa el portal G1.
Los tres fueron trasladados de urgencia al Hospital Municipal Lourenço Jorge, en Barra da Tijuca. Los bomberos, que ya contuvieron el incendio, lo describieron como uno de gran magnitud. Están investigando las causas.
Douglas Henaut, teniente coronel del Cuerpo de Bomberos, confirmó a O Globo que las llamas se iniciaron pasadas las 05.00 AM en las habitaciones en las que duermen los jugadores juveniles del club. El campo de entrenamiento había sido renovado recientemente, pero no esa parte, que iba a ser demolida en los próximos meses.
La tragedia podría haber dejado más víctimas si todos los jóvenes que habitualmente duermen en el complejo hubieran pasado allí la noche del jueves. Sin embargo, como el entrenamiento de este viernes había sido cancelado, muchos se fueron a sus casas. Sólo se quedaron los que son de otros estados y no podían regresar con sus familias.
Flamengo es el club de fútbol más popular de Río de Janeiro, que venía azotada por fuertes inundaciones, causantes de al menos cinco muertes. El complejo, conocido como Ninho de Urubu, está ubicado en el barrio Vargem Grande, en el oeste de la ciudad.
La otra sede de la institución, situada en el barrio de Gávea, había sido afectada por el temporal. Desde hace varios días está anegada y sin luz, así que permanece cerrada.