El 'rover' no da señales desde junio y los intentos por contactar con él han fracasado. Tanto él como su gemelo 'Spirit' cambiaron el conocimiento sobre Marte con sus hallazgos.
Los científicos de la NASA no perdían la esperanza pero tampoco eran optimistas. Su vehículo robótico Opportunity no envía ninguna señal desde que el pasado mes de junio tuvo que hacer frente a una gran tormenta de polvo en Marte. La agencia espacial ha hecho a lo largo de estos meses numerosos intentos para restablecer la comunicación con su rover, que el pasado 24 de enero cumplió 15 años en el planeta rojo.
Pero tras sus infructuosos esfuerzos -un millar de llamadas hicieron- la NASA ha decidido dar por terminada la misión de su emblemático rover en Marte, según han explicado el miércoles por la tarde los responsables de la agencia espacial en una rueda de prensa.
"Opportunity se ha ido pero nos ha dejado su legado", ha declarado el director del Jet Propulsion Laboratory (JPL), Michael Watkins, que ha descrito al rover como "un geólogo robótico". Tanto el director de la NASA, Jim Bridenstine, como el director de Ciencia, Thomas Zurbuchen -que ha definido a Opportunity como "un héroe"-, han preferido considerar esta jornada de despedida como un día para celebrar los logros del icónico robot marciano.
"Hoy es un día triste", comenta a EL MUNDO Alberto G. Fairén, el único científico español que ha formado parte del equipo de Opportunity. "Es uno, por no decir el mejor, de los ingenios mejor diseñados por el ser humano: fue concebido para trabajar en Marte durante tres meses (90 soles) y estuvo trabajando de forma continuada 14 años y 4 meses (desde el 25 de Enero de 2004 hasta el 10 de Junio de 2018)", apunta su colega Jorge Pla-García, uno de los investigadores del Centro de Astrobiología (CAB/CSIC-INTA) que se encarga de la estación meteorológica de Curiosity, el único rover que queda ahora operativo en Marte tras la muerte de Opportunity.
Y es que tanto él como su rover gemelo Spirit (que quedó atrapado en un cráter en 2009) superaron con creces las expectativas puestas en su misión, denominada MER (de Mars Exploration Rovers). Partieron rumbo a Marte en 2003 (Spirit fue lanzado el 10 de junio y Opportunity, el 7 de julio) y llegaron en enero de 2004. Opportunity, señala Pla-García, "ha sido el vehículo que mayor distancia ha recorrido en un cuerpo extraterrestre en la historia (45,16 kilómetros), superando con creces los 39 kilómetros recorridos por el rover soviético Lunokhod 2 en la Luna".
Hay muchos aspectos en los que los vehículos MER fueron pioneros, como enumera Alberto G. Fairén: "Fueron los primeros robots en mostrarnos muchas cosas que no sabíamos: que es un planeta gris, no rojo, porque llevaban unos pequeños pinceles para limpiar la capa de polvo rojo en las rocas, y debajo, los materiales son grises; fueron los primeros en detectar meteoritos sobre la superficie de otro mundo, en hacer perfiles térmicos de la atmósfera marciana y en cuantificar la erosión eólica sobre diversas superficies; validaron por primera vez in situ los datos obtenidos por varias misiones orbitales y fueron los primeros en determinar la composición y distribución de rocas, minerales y suelos sobre la superficie de Marte".
Pero, sobre todo, subraya Fairén, "fueron los primeros en demostrar que Marte fue un mundo habitable hace miles de millones de años, con agua líquida estable sobre su superficie: Spirit encontró los restos de antiguos manantiales hidrotermales, y Opportunity descubrió las huellas de lagunas de extensión variable que anegaban episódicamente las planicies de Meridiani hace más de 3.500 millones de años. El agua era ácida y posiblemente salada, un entorno ideal para algunos microorganismos extremófilos de la Tierra".
Opportunity demostró además que Marte ha cambiado mucho a lo largo del tiempo y según las zonas, pues tuvo en algunos lugares y momentos aguas ácidas y saladas, y en otras zonas y periodos agua dulce: "Esto hace que su pasado sea mucho más parecido a la Tierra, y mucho más interesante desde un punto de vista astrobiológico", explica el investigador. Clave para llegar a esta conclusión fue el hallazgo de los materiales más antiguos que se han analizado hasta la fecha in situ, unos sedimentos de hace 4.000 millones de años que contienen arcillas.
Durante su aventura marciana, el rover observó nubes de hielo de agua, escarcha sobre una de sus cámaras y fotografió campos de dunas esculpidas por el viento, además de descubrir el mineral jarosita en Marte, que como recuerda Pla-García, se llama así por el lugar dónde se descubrió, el Barranco del Jaroso en Almería. "Por los estudios realizados en la Tierra, sabemos que este mineral sólo se puede formar por la presencia de agua líquida".
Junto con Spirit, Opportunity forma parte ya de la historia de los dos planetas.
ROSALIND FRANKLIN y MAR2020, LOS 'ROVERS' DEL FUTURO
La nueva generación de vehículos robóticos que toma el relevo de los gemelosOpportunity y Spirit despegará en 2020 y cuenta con instrumentos más sofisticados para explorar el planeta rojo. Con la muerte de Opportunity sólo Curiosity, también de la NASA, está operativo en la actualidad. Desde 2012, explora el cráter Gale. El próximo vehículo de la agencia espacial de EEUU se llama Mars2020.
Para 2020 está previsto también el lanzamiento del vehículo robótico de la misión Exomars, que la Agencia Espacial Europea (ESA) está desarrollando junto a Roscosmos, la agencia rusa. Se va a llamar Rosalind Franklin en homenaje a la científica británica que junto a otros colegas descubrió la estructura del ADN, según anunció la semana pasada la ESA.
Franklin (1920-1958) falleció a los 37 años de un cáncer de ovarios, cuatro años antes de que sus colegas Francis Crick, James Watson y Maurice Wilkins ganaran el Premio Nobel en 1962 por sus trabajos sobre el ADN. Aunque los Nobel no se pueden otorgar póstumamente, se criticó que el nombre de Franklin no fuera mencionado durante los discursos. Con los años, su papel en este descubrimiento ha sido reconocido, como refleja la elección de su nombre para bautizar al sofisticado rover marciano.
Su nombre fue sido seleccionado por un panel de expertos a partir de una lista de candidatos propuesta por el público (unas 36.000 personas participaron en el concurso organizado en Reino Unido). "Este nombre nos recuerda que explorar está en los genes humanos. La ciencia está en nuestro ADN y en todo lo que hacemos en la Agencia Espacial Europea", declaró Jan Woerner, director de la ESA.
El rover Rosalind Franklin cuenta con un taladro que le permitirá perforar la superficie marciana hasta los dos metros de profundidad. Con los análisis de las muestras que tome los científicos quieren investigar la presencia de vida en el pasado marciano.