Patricia García, concejal por el partido Respeto, dialogó con Gabriel Martella y Julián Colombo en Micrófono Abierto acerca de la nota de la semana.

La concejal consideró que el tema más preocupante y que se está profundizando es la pobreza, es el hambre. “En el Concejo Deliberante las demandas se han profundizado, se ve mucha vulneración de derechos en adultos mayores, no llegan a fin de mes y quieren volver a realizar una actividad, sólo para comer”.

García mostró su preocupación frente a los datos del INDEC, “son decadentes y preocupantes y creo que esos datos son viejos, porque se han profundizado aún más. En Río Cuarto hay 51.200 ciudadanos que están en la pobreza, de los cuales 7.400 son indigentes. Hay gente que no puede reconectar la luz porque se la han cortado, hay muchas familias que han dejado de cenar, de merendar, comen al mediodía y un desayuno para los chicos, gente que ha estado bien, que lograron alquilar y hoy deciden comprar en terreno fiscal”.

Ante los preconceptos que muchas veces se manifiestan de que “no trabaja el que no quiere”, García manifestó que antes se ponía mal y contestaba, hoy no responde, pero manifestó su preocupación porque “si no estamos unidos, no se puede”.

La concejal comentó que hay muchos riocuartenses analfabetos, sin documentos, que no saben hacer su curriculum. “El  derecho de la identidad no está asegurado, no te puede faltar el dni y hay gente que no lo ha tenido en su vida y a la que no le llegan las campañas. Al fondo de de Las Delicias, a metros del Riverside, es tremenda la vulneración que hay. Hay gente que no sabe que cuando pierde el dni debe hacer una denuncia, y cuando van a la policía se les pide testigos y pagar un timbrado, esas cosas hay que evitarlas, no ser tan burocráticos porque el derecho a la identidad lo tenemos todos”.

En relación a los sueldos que perciben los concejales, que es de un monto de 71 mil pesos y quedan netos unos 58 mil, el bloque de Respeto decidió que con los excedentes de cada uno de los sueldos se ponen en una cuenta del banco y una comisión revisa y decide en asamblea a dónde se dirige ese dinero. Así se compró la camioneta que se usa para todo tipo de acciones, como la de buscar donaciones a distintas empresas “por ejemplo esta semana cinco copitas de leche recibieron heladeras repletas de yogures”.

La concejal de Respeto manifestó que duerme tranquila “porque no me llevo ese sueldazo a mi casa, que a lo mejor para algunos está bien porque tenemos una responsabilidad muy grande, pero a mí me daría mucha vergüenza, porque también lo merecería un trabajador que se expone al frío, al sol y nosotros estamos bastante cómodos en el Concejo”.