Cada generación de tecnología de redes celulares, desde 1G a 4G y LTE, trajo mejoras que impactan la disponibilidad y la conexión. Pero 5G, más que cualquier generación anterior, tiene la capacidad de revolucionar la forma en que vivimos, trabajamos y jugamos.
Una mayor rapidez (baja latencia) y mayores anchos de banda para poder transmitir más cantidad de datos fueron algunas de las ventajas que se lograron. Sin embargo, con la red 5G se producirá la evolución más grande que hasta ahora hemos visto. 5G será 1000 veces más rápida que 4G, y el tiempo de latencia se reducirá a una décima parte de las latencias actuales.
Esto significa que 5G será la generación que hará posible el desarrollo de las ciudades inteligentes, los vehículos autónomos, la realidad aumentada, y de otras aplicaciones que requieren rapidez en el procesamiento de los datos y un ancho de banda mayor para transmitir más información. En lo que se refiere únicamente al procesamiento de vídeo, se espera un aumento considerable y solo con una red como 5G se podrá dar respuesta a la creciente demanda de estos servicios por parte de los usuarios.
Pero como nueva tecnología, no está exenta de retos. Para su implementación precisará una gran inversión en lo que se refiere a equipamiento y servicios, ya que requerirá casi tres veces más radios bases o antenas transmisoras/receptoras que la generación anterior. Es fundamental que la operación en cada uno de estas radios bases se mantenga eficiente y resiliente. Además, 5G necesitará un espectro de frecuencias mucho mayor para que todas las transmisiones inalámbricas como radio, TV, celulares y WiFi, puedan usarlo y transmitir sin causar interferencia a otros. La coordinación para que todas las empresas de telecomunicaciones utilicen este rango del espectro es otro de los retos que enfrentamos.
Los operadores telefónicos, por su parte, deben tener presente que para la implementación de la red 5G, al igual que se enfocan en el desarrollo de una red más rápida y de mayor ancho de banda, también deben prestarle mucha atención a los temas de eficiencia energética y uso de fuentes de energía limpia. Es importante, asimismo, la selección de una infraestructura de soporte resiliente, que debe garantizar ante todo la continuidad de los servicios, ya que en los días presentes y venideros, una interrupción de los servicios de transmisión de datos puede poner en riesgo la seguridad humana.
Un reciente estudio realizado por Vertiv, en conjunto con 451 Research, una firma de analistas de tecnología, brinda una clara visión del panorama empresarial acerca de la red 5G. Según el estudio, sus participantes, 100 ejecutivos responsables en la toma de decisiones en compañías de telecomunicaciones en todo el mundo, se sienten optimistas acerca de los desafíos y de los planes para la implementación de la nueva tecnología. Como dato relevante, el 12% de los operadores espera ofrecer servicios 5G durante este año, y un 86% para 2021.
Las oportunidades que se presentan con la implementación de la próxima tecnología 5G en todo el mundo son tan grandes que todavía no hay capacidad de cuantificarlas. La tecnología 5G nos permitirá vivir conectados y disfrutar de las ventajas del mundo tecnológico. Las ciudades inteligentes, los vehículos autónomos, el reconocimiento facial, la realidad aumentada y virtual, la medicina digital, entre otros, serán la nueva realidad que traerá muchos beneficios y, sobre todo, una mejora en la calidad de vida de nuestras sociedades.