“No se llegó a un acuerdo entre jugadores y dirigentes, pero nos fuimos muy bien de Belgrano. El único problema fue el factor económico por eso dimos un paso al costado y ahora me toca emigrar a otro club”, explicó Álvarez.
Refiriéndose a los motivos del desacuerdo, agregó: “Faltó esfuerzo de parte de ellos. Puse el ciento por ciento y le dimos al club lo que tanto quería. Me llamó la atención que no pudiéramos arreglar y me parece que no nos dieron la importancia que merecíamos. Me quedo con esa bronca pero me llevo el amor y el apoyo de la gente”.
Con respecto a la manera en que continuará su carrera, el jugador expresó: “Me voy a quedar en la Liga. Ya estoy instalado en Río Cuarto y no me voy a ir de acá. En Atlético San Basilio estoy empezando a sentir la comodidad que necesito así que estoy bien. Obvio que siempre sigo pensando en dar lo mejor, en cualquier lado”.