Una mujer sufrió una terrible muerte tras prenderse fuego durante una cirugía. Sucedió en un hospital de Bucarest, capital de Rumania. La paciente, que padecía cáncer de páncreas, habría comenzado a incendiarse por el contacto de una chispa producida por un bisturí eléctrico con un desinfectante a base de alcohol.

La información de este triste episodio fue dada a conocer por Víctor Costache, ministro de Salud del gobierno rumano. De acuerdo con el medio británcio The Guardian, la mujer fallecida, de 66 años, sufrió quemaduras en el 40 por ciento de su cuerpo.

Indican los medios locales que el escalpelo rosó con el desinfectante inflamable y se originó una chispa. El fuego no tardó en propagarse sobre el cuerpo de la mujer. Destaca el diario La Nación, que el político rumano Emanuel Ungureanu, dijo en Facebook que la paciente “se encendió como una antorcha”.

La escena se habría vuelto aún más terrible pocos segundos más tarde, cuando una enfermera desesperada lanzó agua con un balde sobre el cuerpo ubicado en la mesa de operaciones. Desde el ministerio de Salud rumano dijeron que se investigaría el “desafortunado incidente”.

Por su parte, Horatiu Moldovan, viceministro de la cartera de Salud rumana, dijo: “Los cirujanos deberían haber sido conscientes de que está prohibido usar un desinfectante a base de alcohol durante los procedimientos quirúrgicos realizados con un bisturí eléctrico”. De tal forma, la familia de la víctima contó que el personal médico había declarado que se trató de un “accidente”, aunqeu no habrían dado más detalles.

Fuente: Radio Mitre