Las aerolíneas ofrecen buenas ofertas, pero los turistas deben tener en cuenta el contexto y condiciones de los servicios a contratar.
La compra de pasajes aéreos durante la pandemia puede tener ventajas y beneficios. Por la caída en la demanda, las aerolíneas están ofreciendo vuelos a precios más accesibles, pero al mismo tiempo hay mayores riesgos de cancelaciones o postergaciones de los vuelos.
Aunque la compra de pasajes para viajar en 2021 tuvo un leve repunte, en las últimas semanas se vio frenada por la incertidumbre que generó la postergación de los vuelos comerciales, que se preveían para septiembre y aún no tienen nueva fecha de reinicio oficial confirmada.
¿Qué pasa si al momento de viajar todavía no se levantaron las restricciones o si vuelven a limitarse las operaciones aéreas por un rebrote de casos en otros países? “En caso que se generen esas situaciones, las líneas aéreas y agencias de viajes deberán rever sus políticas de devolución, reprogramación o emisión de bonos o vouchers. En este marco, es que el turista debe ser consciente del contexto y condiciones con los que aceptará los servicios a contratar”, explicaron desde la Defensoría del Turista.
“Los seguros de cancelación y la contratación de asistencia al viajero serán dos nuevos contratos que los turistas deberán considerar a la hora de adquirir servicios turísticos”, señalaron.
Desde las agencias de turismo aseguran que hay muy buenas tarifas para viajar en 2021, con la ventaja de que la mayoría goza de tarifas flexibles para realizar cambios de fecha, una de las tendencias que tendrán los viajes en la etapa pospandemia.
En Despegar, por ejemplo, hay opciones para viajar en 2021 y con flexibilidad: hacia Los Ángeles desde $50.265; a Orlando en $52.556 y a Miami desde $47.029; o a Río de Janeiro, desde $21.441.
En tanto, se consiguen precios a Cancún en $46.598 y a Madrid en $59.071, todos con la posibilidad de pagar en cuotas. También para destinos nacionales hay precios económicos: paquetes con vuelos y alojamiento a Iguazú por cuatro noches desde $12.146; a Ushuaia por $12.835 con vuelo y estadía por tres noches; o a Bariloche con vuelo y hotel por 2 noches por $13.904.
En una encuesta realizada entre sus clientes argentinos, el 35% de los encuestados aseguró que haría su primer viaje tras la pandemia a destinos internacionales el próximo año.
“La mayoría de los proveedores ha entendido la necesidad de ofrecer opciones con flexibilidad de reservas, confiando en que si es necesario, se podrá hacer cambios de fecha. El entorno sigue siendo de incertidumbre para la industria, pero vemos de manera muy positiva la comprensión de la importancia del sector y la pasión por viajar intacta entre los argentinos, siempre atentos a la situación sanitaria. Los proveedores están adaptando sus propuestas, así que somos optimistas de cara al futuro”, indicó Paula Cristi, gerente general de Despegar para Argentina y Uruguay.
Desde Turismocity consideraron que los riesgos son bajos, ya que la gran mayoría de las empresas vende con política flexible de cambios. “El riesgo sería comprar una opción que no permita cambio o que tenga una multa. Pero no conozco ninguna que esté cobrando multa. Si puede pasar que no te cobren multa pero si diferencia de tarifa y que cuando quieras cambiarlo esa diferencia sea muy alta”, señaló Julián Gurfinkel, fundador de Turismocity.
Las consultas de agosto —según indicaron— se mantenían en niveles similares a las de julio, donde habían tenido un leve repunte. Pero se frenaron por la incertidumbre sobre la salida de los vuelos, luego de que el Gobierno no pusiera una fecha concreta para la reactivación de los vuelos comerciales. “Si en septiembre ya se podía volar normal, la demanda explotaba. Pero el contexto va frenando. Igual sigue fuerte las consultas de internacional a partir de marzo y diciembre, enero y febrero nacional”, agregó Gurfinkel.
Matías Mute, de la plataforma Promos Aéreas, aseguró que hoy hay una amplia oferta de rutas hacia Europa con origen en Brasil y regreso a Buenos Aires por precios que se ubican a partir de los $30.000. Una de las tarifas, por ejemplo, es de $29.585 para vuelos con origen en San Pablo con destino a Berlín y volviendo a Buenos Aires por Oporto.
“Con el tiempo notamos que las rutas eran variadas e interesantes para organizar un viaje al viejo continente. La posibilidad es atractiva porque la mayoría de estos vuelos salen desde San Pablo o Río de Janeiro y llegan a una ciudad de Europa, pero el vuelo de regreso parte desde otra. En un mismo viaje, se pueden conocer dos o más ciudades”, describió Mute. Y advirtió que aunque se tenga que comprar el vuelo de ida hacia alguna de las ciudades brasileras, el precio final se sigue ubicando muy por debajo que los vuelos salientes desde la Argentina.
Algunos ejemplos: Roma a partir de $37.894 desde San Pablo con regreso desde Barcelona a Buenos Aires. O Madrid a partir de $31.854 desde Río de Janeiro con vuelta desde Lisboa a Buenos Aires.