El Frente de Todos era derrotado en las elecciones legislativas en todo el país, pero recortaba la distancia en provincia de Buenos Aires.
El Gobierno perdía las elecciones legislativas de medio término en la mayoría de las provincias y era derrotado en seis de las ocho provincias en las que competía por tres bancas del Senado en cada una, aunque recortaba de manera clara la diferencia que había registrado entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires en las primarias de septiembre pasado, principal bastión electoral de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
Según los primeros datos oficiales, la Cámara alta quedaría con 35 legisladores, a dos del quórum propio. Los candidatos del gobierno nacional sólo habían ganado en Catamarca y Tucumán, mientras que las boletas de Juntos por el Cambio ganaron en Chubut, Corrientes, Córdoba, Mendoza, Santa Fe y La Pampa.
En el caso de la provincia de Buenos Aires, los 4 puntos de distancia que había obtenido la lista encabezada por Diego Santilli-Facundo Manes a la de Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollan, se reducía a menos del 2 por ciento.
En la competencia por las bancas de diputados, Juntos por el Cambio se imponía en Buenos Aires, Santa Fe, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Entre Ríos, Chubut, Corrientes, Jujuy, La Pampa, Misiones y Santa Cruz. Ganaban partidos provinciales en Río Negro (Juntos Somos Río Negro), Neuquén (Movimiento Popular Neuquino). San Luis, con una coalición opositora a los Rodríguez Saá y al Gobierno, se imponía Unidos Por San Luis, de Claudio Poggi.
En el caso de Frente de Todos, se imponía en Catamarca, Chaco, Formosa, La Rioja, Salta, San Juan y Tierra del Fuego. Alineados con el Gobierno, también se imponía en Santiago del Estero.