El empresario multimillonario y dueño de la empresa espacial SpaceX trazó su visión de la conquista del planeta rojo dentro de la próxima década.
Tal como sucedió en la década del 60 y 70 con la llegada del hombre a la Luna, la actual era espacial promete muchas aventuras, algunas inclusive, que llegan con humanos en otros mundos.
Mientras sus competidores perfeccionan sus técnicas de vuelos privados espaciales de corto alcance y de minutos de duración, el empresario Elon Musk se imagina en el próximo lustro o en el peor de los casos, dentro de la próxima década con uno de sus cohetes posándose en la superficie de Marte con humanos dentro. Es que su empresa espacial privada llamada SpaceX ya se adelantó a sus competidoras y provee los cohetes con los que los norteamericanos volvieron al espacio después de casi una década en la que estuvieron obligados a contar con la ayuda de los rusos para subirse a sus cohetes Soyuz y así continuar con sus actividades en la Estación Espacial Internacional.
"Me sorprendería si no aterrizamos en Marte dentro de cinco años”, dijo Elon Musk a mediados de diciembre en una entrevista con la revista Time, en la que fue tapa y destacado como personaje del año. “El objetivo general es hacer la vida multiplanetaria y permitir que la humanidad se convierta en una civilización espacial”, aseguró Elon Musk, quien cree que SpaceX ayudará a hacer realidad esta idea. Asimismo el empresario considera que Marte es el planeta candidato para convertirse en el nuevo hogar de la humanidad en caso de la Tierra se convierta en un sitio inhabitable.
En su reciente participación en el podcast de Lex Fridman, Elon Musk volvió a reafirmar esta idea. ¿Cuándo crees que SpaceX pondrá a los seres humanos en la superficie de Marte? Fue la pregunta de Lex Fridman. Después de una pausa que parecía interminable, Elon Musk fue categórico: “En el mejor de los casos, 5 años. En el peor de los casos, 10 años”. Una visión muy optimista que dependerá de resolver varias cuestiones no menores, tanto en el ámbito de la ingeniería como en el económico.
“Starship es el cohete más complejo y avanzado que jamás se haya fabricado. La optimización fundamental de Starship es minimizar el costo por tonelada para orbitar y, en última instancia, el costo por tonelada para llegar a la superficie de Marte”, afirmó Musk, que asegura que existe un costo por tonelada para llegar a la superficie de Marte que se debe lograr para que sea posible establecer una ciudad autosuficiente. “Nadie puede volar a Marte por mil millones de dólares”, explicó el CEO de SpaceX y agregó que no hay cantidad de dinero en el mundo que hoy pueda asegurar un boleto al planeta rojo.
En una velada crítica a las misiones Apolo que depositaron al hombre en la Luna, Musk fue más allá y aseveró que la humanidad no puede darse el lujo de llegar a Marte, dejar huellas en la superficie y no volver por 50 años; e incluso se refirió a la necesidad de pensar a los humanos, a futuro, como una “raza multiplanetaria” para ser capaces de sobrevivir a algún tipo de calamidad que ponga en riesgo la vida en la Tierra.
“La próxima gran cosa es construir una ciudad autosuficiente en Marte y llevar allí a los animales y criaturas de la Tierra”, señala. Esto se trataría, en palabras del magante, una especia de “arca de Noé futurista” que albergaría más de dos ejemplares de cada especie porque sería “un poco raro si solo hay dos”. Así, el empresario busca desarrollar un gran asentamiento en el planeta rojo.
Durante la entrevista, Elon Musk también se animó a analizar cómo sería una hipotética forma de gobierno para los primeros colonizadores de Marte. “Sería una nueva frontera y una buena oportunidad para reimaginar la naturaleza de un gobierno. Yo sugeriría tener una democracia directa, para que la gente vote directamente sobre algo, en lugar de una democracia representativa”, indicó.