Las vidas de Twitter y Elon Musk parece que, finalmente, acabarán unidas con final feliz. El magnate sudafricano, CEO de Tesla y fundador de SpaceX, anunció este martes que renunciaba al litigo que mantenía con la red social y volvía a poner sobre la mesa la oferta inicial para adquirirla.
Un total de 44.000 millones de dólares para adueñarse de la red de 'microblogging' a la que denunció por ausencia de transparencia al negarse Twitter a ofrecerle a Musk la verdad sobre los usuarios falsos automatizados, los famosos 'bots'.
Ha decidido, sin embargo, olvidarse de esas diferencias, evitarse un problema mayor en el juzgado, y seguir adelante con la compra. Además, en más de una ocasión, Musk ha deslizado atisbos de ideas de lo que pretende hacer con una de las redes sociales más populares en todo el mundo.
Discurso libre y sin censura
Musk es un ferviente defensor de la libertad de expresión a toda cosa. Es por eso que se especula con que, con su llegada a Twitter, la moderación a la que está sometida la red, especialmente cuando se trata de temas sensibles, desaparezca.
Esto puede afectar, incluso, a las cuentas censuradas en ciertos territorios con motivo de la guerra en Ucrania o al propio Donald Trump, baneado por Twitter en una polémica decisión de la compañía.
¿Llamadas y mensajes?
Otro de los proyectos que baraja Musk para Twitter es añadir otras funcionalidades a la red social: como el de permitir hacer llamadas o integrar servicios de mensajería en lo que él ha venido a llamar X, la aplicación para todo.
Acabar con los bots
Por supuesto, la cruzada de Musk contra los 'bots' tendrá un especial protagonismo en su andadura al frente de Twitter y se espera que trate de hallar la manera de que desaparezcan por completo.
El siempre recurrente botón de editar
La posibilidad de incluir la opción de editar tuits ya publicados ha sido una idea recurrente desde casi los inicios de Twitter. Musk se ha mostrado siempre partidario de esta funcionalidad pese a los conflictos que puede generar e, incluso desde la propia red, se ha planteado en más de una ocasión.
Pase lo que pase, cuando la compra se materialice, es posible que Twitter, tal y como lo conocemos, haya pasado a la historia para siempre.
ABC
Foto: REUTERS