Un tapado en la lucha por el título del Torneo Inicial, Vélez, reaccionó a tiempo este viernes en Liniers y obtuvo un  2-1 sobre Godoy Cruz que lo dejó provisoriamente a tres puntos de la cima y, dependiendo de muchos resultados, prolongando sus chances en la pelea. El encuentro lo dirigió Pablo Lunati, en su retorno a la Primera División.

Cuando se jugaban apenas tres minutos,. Sebastián Sosa le sacó un terrible mano a mano a Facundo Castillón pero, tras el rebote, el mismo atacante envió un centro pasado desde la derecha para que Mauro Óbolo cabeceara a la red. Justo el cordobés, salido del club de Liniers, en donde estuvo en dos etapas y nunca pudo explotar.

Después, quedó claro en el desarrollo que el Fortín tenía más armas para mantener la pelota y amenazar con asiduidad el arco contrario, pero fallaba mucho en la contención y quedaba expuesto a los contraataques mendocinos.

Lucas Pratto tuvo dos, en una definió alto y en la otra lo frustró Jorge Carranza, el mismo que más tarde anticipó a Mauro Zárate, quien volvía tras un desgarro. Pero también, el omnipresente Óbolo estrelló un disparo en el palo y remató alto desde afuera antes del descanso.

A los 12 del complemento, Fabián Cubero escapó por la derecha, envió el centro y Agustín Allione puso la cabeza para la iguialdad. Después, Sosa logró anticipar a Castillón, en uno de los pocos avances visitantes en un período en el que bajó mucho su nivel.

Zárate definió después muy bien a la red pero su tanto fue anulado por un dudoso fuera de juego, Lucas Pratto remató alto, Jorge Curbelo cabeceó por arriba y, a los 39, llegó el momento cúlmine de la noche del Fortín. El ingresado Ramiro Cáseres habilitó por la izquierda a Pratto, quien se acomodó afuera del área y sacó un tiro a la derecha de Carranza para desatar la fiesta entre los suyos.

Trabajosamente, Vélez se aferró así a las pocas oportunidades que mantiene en el certamen. Godoy Cruz, mientras tanto, no logró sumar nada para salir de la zona de descenso.