El Obispo Adolfo Uriona destacó que el actual Papa planteó una nueva manera de evangelizar, con una preocupación fuerte sobre el planeta y las personas más vulnerables.
El Obispo Adolfo Uriona habló con Radio Río Cuarto acerca de los 10 años del Papa Francisco.
El Obispo de la Diócesis manifestó que “ha sido una alegría para todos tener un Papa argentino. Es la primera vez que hay un Papa que no es europeo, que asume la Cátedra de San Pedro y esta misión tan importante y fundamental en la Iglesia”.
Uriona valoró todo lo que dejó Francisco en estos 10 años, “con una perspectiva de reforma de la iglesia y de una relación nueva con el mundo, la cual es de una riqueza inigualable que la veremos en toda su dimensión más adelante”.
De acuerdo a lo expresado por el Obispo es destacable la primera encíclica del Papa, la del “Evangelii Gaudium” con una manera de evangelizar distinta de la iglesia y luego la “Laudato Si” en la que se plantea que es fundamental cuidar la casa común que es el planeta y los pobres.
“Es una encíclica ecológica y social completa, porque los pobres son los primeros perjudicados”.
El Obispo manifestó con contundencia que “Francisco es un profeta para quienes lo quieran escuchar y nos está exhortando, no sólo desde la encíclica, sino todo el tiempo porque sino vamos a la autodestrucción”.
Agregó que el actual Papa ha cambiado la perspectiva de como evangelizar, haciendo un llamado a los sacerdotes y al pueblo de Dios para salir de una zona de comodidad, “es necesario una Iglesia en salida, que salga de los templos, que salga a las periferias geográficas y existenciales”
Uriona reconoció que los hermanos evangélicos “son mucho más misioneros que nosotros, salen a buscar a la gente. La Iglesia en su inicio salió al mundo a anunciar al Evangelio y si nos quedamos en nuestras comunidades no cumplimos con el Evangelio”.
Respecto al tema de las críticas que ha sufrido el Papa a través de los medios de comunicación y que han generado que en muchas ocasiones haya sido desacreditado comentó que “El Papa habla a la Iglesia toda, quiere conducir a toda la iglesia y tiene una preocupación por el mundo entero. Hay que leerlo a Él y no lo que se dice de Él, no como lo interpretan. Los más sencillos lo descubren como un gran pastor”.