Desde hace un tiempo, el gobierno decidió que las empresas etiqueten, con hexágonos negros, en el envoltorio de sus productos, los elementos que contienen en exceso.

Es así que podemos observar que productos lácteos que parecían saludables en realidad tienen excesos en azucares. O galletas que parecían o vendían como sanas, tienen exceso en sal. Un verdadero servicio al consumidor.

Sin embargo, un grupo de dirigentes políticos, alineados a un sector, decidieron salir en masa a criticar esta medida ya votada, consensuada, aprobada y ejecutada.

En su momento, miles de profesionales de la salud celebraron ésta decisión y hasta la aplaudieron comparándola con la misma decisión tomada en países del primer mundo. Esos países a los que siempre nos queremos parecer, o por lo menos siempre ponemos de parámetro.

Mientras se daba esta discusión, un usuario de la red social twitter opinó: “Y si le ponemos etiquetado frontal a los políticos?”. Ahí se me vino una idea, la de proponer a quien corresponda: “Y si le ponemos etiquetado frontal a las boletas de los partidos políticos y podemos analizarlas en el cuarto oscuro?”.

La idea surge de la sola comparación. Supongamos que se da, juguemos, hagamos el ejercicio cívico. En determinada boleta podemos poner un hexágono que diga “Exceso de populismo” u otro que diga “Negacionanista de la dictadura”, o en su defecto otro que diga “Exceso en el libre comercio” o porque no que diga “Estado Intervencionista”, súmale el de “Devaluadores temporales”.

Con ésta idea no solo podremos ver, escuchar y leer sus propuestas en los diferentes medios durante la campaña, sino también poder distinguir valores claves de cada candidato. Saber desde que lugar parten, son y se comportan. ¿No estaría bueno?, ¿No sería honesto?

Claro, la discusiónque se plantearía sería: ¿Qué organismo estatal se encarga de poner esos etiquetados?, ¿la Justicia?, ¿El tribunal electoral?, ¿El Congreso? Ahí el debate se vuelve estéril, porque nos seguirán vendiendo productos/candidatos con diferentes excesos prometiéndonos ser saludables cuando en realidad esconden secretos que solo lo vemos reflejados a los años de gobierno. Porque todos esos organismos también tienen en su interior excesos que nadie quiere etiquetar, pero como en el alfajor, todos conocemos.

De ésta misma manera, esta nota podría ser etiquetada con un hexágono que diga: “Exceso de Civismo”, “Contiene democracia Saturadas” o mejor dicho “Sueña con un país mejor”.