Cada tiempo de la historia tiene características. La violencia entre pares y la exaltación a la imagen son parte de las particularidades de este tiempo.

Muchas personas buscan tener un rostro típico de época, alejado de las propias características que otorgan las diferencias étnicas y el sello de unión de dos personas en la fecundación.

Aun cuando la tendencia es un retorno a lo natural, a pantalla y la calle muestra rostros clonados, estirados labios opulentos, mentones geométricos, pómulos manzana y pechos erguidos.

Los especialistas como el Dr. Christian Sánchez Saizar, miembro de la Sociedad Argentina de dermatología, define esta tendencia en los cirujanos y pacientes, como producto de un análisis matemático llamado “Golden Ratio'”.  Esto es un cálculo matemático para  determinar las medidas específicas del rostro, por ejemplo, qué distancia de separación tiene el ancho de la cara.

Los rasgos parecen clonados y se caracterizan por la cara ovalada, cejas esculpidas, pómulos de manzana, ojos grandes, boca con el  labio inferior más grande que el superior y una nariz pequeña.

Más allá de esta obsesión por transformar el cuerpo, existen conductas homicidas en quienes realizan prácticas sin estar capacitados ni autorizados, por lo que es necesario reiterar la necesidad de elegir con responsabilidad al profesional.

En diciembre del año pasado la modelo Silvina Luna publicó un libro “Simple y consciente“ y en varios pasajes se refirió a las cirugías estéticas a las que se sometió. Hoy hubo un nuevo pedido de cadena de oraciones por la salud de la modelo y actriz, la que se encuentra nuevamente intubada después de ser internada en el Hospital Italiano desde el pasado 13 de junio.

La Dra. Mónica Milito es médica especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, titular de la Clínica que lleva su apellido y que atiende junto a su hijo. Tiene estudios de post-grado cursados en Harvard Medical, es miembro de la Asociación Médica Argentina y reconocida internacionalmente por sus aportes a la cirugía estética y a la aplicación de nuevas tecnologías.  Atiende y atendió a muchas víctimas del tristemente conocido Lotocki, incluida la modelo Pamela Sosa ex pareja, Aníbal Lotocki, con quien se sometió a varias operaciones estéticas.

En diálogo con Mabel Sánchez, la especialista afirmó que "el paciente se acerca y es muy importante escucharlo porque a veces algunos cirujanos tienen un narcicismo muy importante y no escuchan al paciente. El paciente puede pedir, proponer, pero el médico es quien tiene que aconsejar si lo que el paciente quiere es realizable o no".

Por otro lado, Milito desaconsejó todo tipo de tratamientos de relleno porque "cuando uno empieza a inflarse termina deformando el rostro". "Uno no rejuvenece hinchándose la cara con productos", concluyó contundente.