La historia cuenta que fue el geógrafo inglés John Spilsbury quien inventó el primer puzzle del mundo un 29 de enero, alrededor del año 1766. En los hechos, tomó un mapa y lo dividió en partes poniendo como referencia las fronteras políticas de los países. Su idea era que los niños aprendieran geografía.

En 1820, los rompecabezas comenzaron a comercializarse como juegos para todas las edades y en la actualidad siguen siendo uno de los pasatiempos más populares. 

Ahora, 250 años después, un emprendedor santafesino organizó un torneo para quienes comparten el amor por la actividad. Fue durante el 2020, cuando Iván Dubner, aprovechó la pandemia para crear su propio rompecabezas bajo el nombre del emprendimiento Zeppelin Puzzles. 

“Son de calidad por los materiales que utilizo. Por ejemplo, al cartón lo traigo de Europa”, indicó en La Tarde del Limón.

Dijo que los primeros diseños fueron con las temáticas típicas pero que con el correr del tiempo incorporaron la demanda de la gente y agregaron detalles distintivos como el trabajo con artistas argentinos.

Señaló que los rompecabezas estándar tienen 1000 piezas y miden 70 por 50. “Queremos evitar los casos donde de este total de piezas, 250 son de cielo”, aclaró.

Brindó tips de cómo comenzar a armar un rompecabezas de 1000 piezas.

Respecto a la organización de los torneos de armado, dijo que debido a la excelente convocatoria que tuvieron con el primero, organizan otro para este fin de semana en Rosario y próximamente podrían llegar a Córdoba. Todas las edades están incluidas para participar de estos eventos.

“Creamos dos categorías: una familiar de 384 piezas medianas para menores a partir de los 8 años y adultos mayores, y otra un poco más compleja, de 500 piezas pequeñas, para quienes tengan experiencia o ganas de asumir un desafío mayor”, explicó el emprendedor.