Eduardo Buzzi, ex presidente de la Federación Agraria, dialogó con DE UNA acerca de la realidad agropecuaria del país.

En función de las últimas decisiones de Milei expresó que “esto es un menemismo reforzado, es un déjà vu menemista recargado, incluso la etapa menemista fue más sutil, hasta con estilo. Lo de la motosierra fue real no para la clase política y la casta sino para las mayorías y de manera violenta, incluso para los productores agropecuarios, maniceros, maiceros. Si bien mejoro el cambio se lo lleva el incremento de los costos”.

Buzzi manifestó que “se está viviendo una estafa electoral muy grotesca y al mismo tiempo hay medidas de una profundidad y de daño a la población que se sentirá muy mal en el bolsillo de las mayorías de la población”.

El referente del agro brindó su posicionamiento claramente y expresó que no puede ser neutral con lo que está haciendo Milei, “me voy a poner en frente y denunciar lo que hace”.

Planteó que la Federación Agraria se ha opuesto a Milei y hace falta toda la energía posible para luchar contra estas medidas y consideró que la dirigencia agropecuaria tendría que llamar a asambleas.

En relación a las medidas tomadas para el sector ganadero planteó que “los productores ganaderos tienen esperanzas frente a ciertas decisiones y me alegro porque se han cometido muchas injusticias, pero no es justo que muchísimos argentinos no tengan acceso a la carne. Si sigue este proceso liberal extremo, vamos a pagar la carne como si tuviéramos salarios extranjeros”.

Buzzi reconoció que “la decepción es grande, la percepción es compleja y no quiero volver a tener un menemismo exacerbado”.

Agregó que la unidad de acción de las instituciones es indisoluble y los productores piden unidad, “salvo que algunas entidades más afines a las políticas liberales extremas, como la Sociedad Rural Argentina de Palermo fue cómplice de Menem, puede llegar haber división, pero los productores piden unidad de las cuatro entidades y hay que tener sensatez de las políticas productivas, cuando se le suman costos a los productores está mal. Poner en marcha un tractor implica una jornada de 500 mil pesos”.


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