El 7 de octubre quedará guardado en el recuerdo de todo el mundo porque fue cuando Hamas atacó a Israel lo que generó consecuencias tremendas que hasta el día de hoy se ven reflejadas en la Franja de Gaza.

En medio de tantas historias de argentinos que estuvieron allí, una es la de Ezequiel “China” Trzcina de 27 años quien fue herido en combate. Gente Necesaria dialogó con él sobre su historia, la de su familia judía que conoció cara a cara los peores horrores de la humanidad y cómo se proyecta en un futuro cercano.

Ezequiel emigró a Israel hace tres años y medio, le tomó un par de meses aprender el hebreo y a los 10 meses de llegar se alistó en el Ejército para luego ingresar a una unidad de infantería denominada “Paracaidistas”. Terminó el servicio militar, cuatro meses antes del 7 de octubre y tras la invasión de Hamas a Israel volvió al Ejército.

“Ese día a las 6:30 de la mañana comenzaron a sonar las sirenas las cuales resultan de alerta cuando se detecta un misil que ingresa al país. Es algo por lo que no me asusta, estamos acostumbrados pero cuando vi el video de los terroristas en Israel me di cuenta que no era un día normal de misiles”, recordó.

Así fue que el 7 de octubre llegó a la Base militar donde entrenaron para ingresar a Gaza y al día siguiente llegó su cumpleaños, sin torta, ni festejos, habían asesinado a más de 1200 israelíes.

Por otra parte, señaló que al día número 15 de entrar a Gaza, el 19 de noviembre, recibió una herida en el brazo por una esquirla de una bomba que explotó en la calle. Estuvo internado, se recuperó y este 15 de enero llegó a Argentina para visitar a la familia, los amigos y al mismo tiempo arrancar un proyecto de trabajo remoto.

¿Cómo una persona que vive en un país en paz bélica, elige migrar a un país que convive con la guerra de manera diaria?

“Mi proceso tuvo que ver con la historia de mis abuelos, que se escaparon de la guerra y sobrevivieron al holocausto. Eso me hizo entender la importancia de que exista un país como Israel para los judios de todo el mundo. No sé si me voy a quedar en él durante toda mi vida”, dijo.

¿Cómo fue salir a buscar a los terroristas que estaban en Israel?

Recordó que tenían mucha bronca y los civiles estaban muy asustados porque hacía mucho no había una cantidad de terroristas tan grande en el país. “La idea era buscar a los que quedaban en Israel pero sabíamos que iban a estar escondidos por lo que vivimos en comunas agrícolas y recorrimos todo el sector”, señaló.

Dijo que si bien había temor por lo que podían llegar a encontrar, sabían que ellos estaban mejor preparados militarmente. “Queríamos encontrarlos para que dejaran de matar israelíes y al mismo tiempo teníamos miedo por cómo sería el encuentro”, añadió.
 
Israel está en duelo

Dijo que la tristeza de la sociedad es muy grande, aún hay 133 secuestrados y es muy fuerte convivir con la idea de que hay gente inocente en manos de Hamas. “Por más que yo esté con mi familia y amigos hay una parte de mi que no está contenta. Así será hasta que vuelva el último rehén a casa”, concluyó.