El volcán Fagradalsfjall, en Islandia, está listo para su erupción; una fisura secundaria se convierte en una fuente de lava caliente que sacude el paisaje a cientos de metros del cráter. Poco después de esta explosión, las autoridades cerraron el acceso.

El fotógrafo Armand Sarlangue, de Francia, empleó un dron para poder acercarse a la fisura y tomar esta fotografía. Las complejas condiciones del momento hicieron de esta fotografía -y el resto de las de la serie de Sarlangue- en algo único, que pocos otros pudieron inmortalizar.
El portfolio logró el premio 'Highly Commended' (Muy elogiado) en el concurso Travel Photographer of the Year 2023.


​​​​​​​National Geographic