Son el Instituto de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena, y el Consejo Nacional de Agricultura Familiar. En su obsesión por recortar el gasto y bajar el déficit, la gestión de Milei sigue despidiendo a trabajadores.
El Gobierno nacional sigue apretando a los sectores más vulnerables y anunció que cerrará otros dos organismos públicos, lo que dejará en la calle a 900 trabajadores. Son el Instituto de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena, y el Consejo Nacional de Agricultura Familiar.
Cabe recordar que la gestión libertaria-macrista ya eliminó el Ministerio de la Mujer, el INADI y la agencia estatal de noticias Télam, sin presentar un plan de contención para las familias que se quedan sin sustento.
El nuevo brutal ajuste fue informado este martes por el vocero precidencial, Manuel Adorni, en su habitual conferencia de prensa.
“Luego de una revisión de datos calamitosos, profundamente desoladores, este Instituto y el Consejo tenían 964 empleados; se va a transformar en una dirección en a que quedarán 64 empleados. Se van a reducir 900 puestos de no trabajo. Esto va a significar un ahorro de 9000 millones de pesos”, afirmó el funcionario nacional apenas comenzó su relato.
Para justificar la medida, nuevamente -y ya un clásico- el portavoz se refirió a la supuesta "fiesta que había del gasto público” y detalló que los organismos que desaparecerán “Tenía 160 delegaciones, dos sedes, una en Catamarca y otra en Santiago del Estero, y uno de cada tres empleados eran delegados. Tenían 204 vehículos y el 85% del presupuesto se dedicaba a pagar sueldos, casi una agencia de empleo político”.
En ese marco, y minimizando el trabajo que se hacía desde el Instituto y el Consejo, Adorni sostuvo que “Se transferían fondos discrecionales y actuaban organizaciones sociales y municipios. La ineficiencia de este organismo se refleja en que todavía no hemos recibido reclamos de productores ni trabajadores del campo”.
Si bien la promesa de Milei durante la campaña fue achicar el estado echando a “la casta”, los únicos despedidos son trabajadores que pasarán a engrosar el terrible índice de pobreza de casi el 58% que se aceleró durante los 100 días de su gobierno.