En "Es un Montón " dialogamos con Lorena Rocha de AMMAR sobre la tarea sexual en la ciudad y el objetivo de dejar de lado definitivamente el prejuicio de que estas personas son víctimas de la sociedad y pasar a considerar que son elecciones de vida. Destacaron el fenómeno de las redes sociales para la oferta sexual.
"Hace más de diez años venimos trabajando para lograr el acompañamiento de la sociedad que debe entender de una vez por todas que esa actividad es rentada y con ello vivimos. Buscamos evitar prejuicios y victimizarnos porque realizamos esta tarea para ser una contribuyente más", comentó Lorena.
Recordó que todavía la actividad continúa siendo muy perseguida y hostigada, aunque no con el tenor de otros tiempos. Ratificó que la oferta y la demanda sexual permanece a la orden del día y no lo detiene la crisis.
" Hoy la oferta sexual se ha diversificado y se ha tornado un laberinto mediante las redes sociales con todas sus plataformas", indicó.
Hizo referencia al trabajo que están realizando para aglutinar a compañeras con sus demandas , como lo habitacional, alimentación, acompañamiento en cuestiones de adicciones, ginecología y de contención, entre otros.
Destacó la apertura del Estado para atender todo tipo de circunstancias que provengan desde este sector.
Ratificó que el trabajo sexual debe ser considerado en todos sus aspectos como una genuina fuente laboral. Reconoció que hay problemas con la trata de personas.
Dijo que desde un largo tiempo se dejó de lado el famoso "fiolo o representante" porque las propias trabajadores se hicieron dueñas de sus ganancias.
Dejó entrever que hoy las chicas en las calles como antiguo método ya se ve poco y la mayor oferta está en las redes.
" Miramos hacia atrás y vemos a nuestros hijos y nos concientizamos en que hay que darles de comer", sentenció.