La Justicia rechazó otorgarle la libertad condicional al padre Grassi
- 22/08/2024 13:56 hs
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El cura condenado por abuso sexual infantil y corrupción de menores obtuvo el rechazo judicial de su pedido de libertad condicionada tras 11 años de prisión.
La Justicia rechazó otorgar la libertad condicional al padre Julio César Grassi, quien fue condenado en 2009 por dos episodios de abuso sexual infantil. El religioso de 68 años deberá cumplir su pena hasta el 2028, según la decisión unánime del Tribunal en lo Criminal N°1 de Morón. Los fundamentos del fallo se conocerán el 2 de septiembre.
Pasadas las 11, el tribunal comenzó a analizar el pedido del cura, quien tuvo 15 minutos para exponer sus argumentos. Grassi se mostró sorprendido por el limitado tiempo otorgado para fundamentar su solicitud y pidió un cuarto intermedio breve.
Al regresar, se declaró «inocente» y citó varios casos de errores judiciales que llevaron a personas inocentes a prisión. «Muchas veces, un error judicial puede llevar a una persona inocente a la cárcel», afirmó. En su última intervención, aseguró que su comportamiento durante el proceso y la condena fue correcto y que también lo sería si se le concediera la libertad condicional. Grassi se encuentra preso en la Unidad 41 de Campana, donde se recibió de abogado en abril de 2023. Tras obtener su título, decidió representarse a sí mismo y prescindir de su equipo de abogados, quienes habían formulado en septiembre del año pasado el primer pedido de libertad condicional. A lo largo de los años, la defensa de Grassi presentó varias impugnaciones. En 2010, la Sala II del Tribunal de Casación Penal bonaerense confirmó la sentencia condenatoria. Tres años después, la Corte bonaerense rechazó los recursos extraordinarios y, en 2017, la Corte Suprema de la Nación dejó firme la condena tras declarar inadmisible un nuevo recurso de la defensa.
El proceso judicial incluyó el cómputo de la pena, fijada inicialmente hasta agosto de 2026 por la aplicación del «dos por uno». Esta figura procesal establece que las personas con prisión preventiva durante más de dos años tienen derecho a compensar la demora del Estado en llevarlas a juicio mediante el cómputo doble del tiempo en exceso que permanecieron en prisión sin condena. Sin embargo, en junio del año pasado, la Cámara de Apelaciones de Morón declaró inaplicable este beneficio en el caso de Grassi y fijó la culminación de su condena para el 30 de mayo del 2028, tomando como fecha base su detención en 2013.