Luego de derrotar a Atlético Tucumán por 4-1 de local, el plantel de River aprovechó el fin de semana para finiquitar los últimos detalles previos al enfrentamiento contra Colo-Colo de Chile, por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores. Si bien el Superclásico ante Boca del sábado está a la vuelta de la esquina, Marcelo Gallardo, quien mantiene su formación -por ahora- guardada en un cofre bajo siete llaves, pidió ir "primero por lo primero" y enfocarse en la apertura de la serie.

La delegación comandada por el Muñeco se entrenará este lunes a la mañana en el predio de Ezeiza y un rato después despegará desde el Aeropuerto Ministro Pistarini, de la mencionada localidad bonaerense. Se estima que el vuelo saldrá, si los tiempos se respetan, a las 14 horas y aterrizará pasando la mitad de la tarde.

La minipretemporada que encaró el Millonario en el hotel Hilton de Pilar durante el receso de la fecha FIFA tuvo consecuencias en el rendimiento general del equipo, que frente al Decanomostró algunos retazos de la mano del entrenador que caracterizaron a su ciclo anterior. Por lo tanto, no sería descabellado pensar que el merlense saldría al campo de juego del estadio Monumental David Arellano de Santiago con una formación similar a la del viernes.

Una de las pocas salvedades pasaría por el ingreso de Paulo Díaz en lugar de Leandro González Pirez. Si bien el ex-Estudiantes marcó el primero de la noche versus el conjunto tucumano, el chileno había tenido que salir porque necesitaba descansar físicamente luego de jugar los 180 minutos de la doble jornada de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026. De acuerdo a lo que se vio en los compromisos iniciales de la nueva Era Gallardo, todo indica que volverá a componer la dupla con Germán Pezzella.

Desde ya que hay nombres que son una fija en la formación si están aptos, como Miguel Borja, Franco Armani o Fabricio Bustos -entre otros-, pero algunas zonas todavía buscan un dueño permanente. Este es el caso del volante interno, que tras la lesión en el hombro que sufrió Rodrigo Aliendro sigue sin encontrar un sustituto permanente. De todos modos, Nacho Fernández, de buen accionar el pasado viernes, tendría buenas posibilidades de ocupar ese espacio.

A diferencia de lo que ha sucedido en otros cruces de la Copa Libertadores, se estima que no serán demasiados los hinchas que recibirán al plantel en el hotel porque Conmebol dispuso la presencia únicamente de público local tanto en Santiago como en el Monumental de Buenos Aires. Distinto fue lo que ocurrió ante Talleres de Córdoba en los octavos, que contaron con hinchas visitantes en ambas ciudades.