“Se puede ir con la receta del remedio caro que te pidió el médico y, por ley, podés pedir en la farmacia uno más barato”
- 18/10/2024 09:59 hs
COMPARTIR EN:
Lo dijo Mariano Rosas, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Río Cuarto. La disparidad de precios en medicamentos en el mercado argentino despierta preocupaciones entre los consumidores y profesionales de la salud.
Mariano Rosas
Mariano Rosas, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Río Cuarto, expuso las inquietudes sobre la notable diferencia de precios de los medicamentos en Argentina en comparación con otros países. "No tengo certeza de cuánto cuestan los medicamentos en España. Lo que sí puedo asegurar es que dentro del mercado local tenemos diferencias de precios que podrían ameritar un informe", comentó Rosas al subrayar la necesidad de una mayor transparencia en el sector.
Un análisis específico reveló que la metformina, un medicamento comúnmente utilizado, tiene precios que oscilan significativamente. Por ejemplo, un producto del Laboratorio Craveri, que tiene una metformina de 500 miligramos por 60 comprimidos, cuesta 13.200 pesos en Argentina, mientras que en España solo cuesta 2,90 euros.
A su vez, el presidente del Colegio de Farmacéuticos resaltó que esta diferencia de precios no es aislada. "Tenemos el mismo producto de Savant Farms a 5.400 pesos. Ya tenemos casi tres veces de diferencia de precio entre un mismo producto dentro del mismo mercado interno", señaló.
El contexto se complica aún más cuando se considera que la legislación argentina permite a los médicos prescribir marcas específicas, lo que limita la competencia entre diferentes laboratorios: “Mientras en la ley de prescripción de medicamentos se habilite la recomendación de una marca, la competencia se reduce. Esto hace que sea muy difícil ajustar los precios a un nivel accesible para la población”, afirmó Rosas.
Asimismo, Rosas comentó que “se puede ir con la receta del remedio caro que te pidió el médico y, por ley, podés pedir en la farmacia uno más barato”.
Además, comentaron acerca del impacto de las regulaciones en los precios: “En otros países, como España, no se permite la prescripción de marcas, lo que fomenta una competencia más saludable y precios más accesibles para los consumidores”.
La situación se vuelve crítica para los jubilados y pacientes de bajos recursos. Rosas mencionó un caso alarmante: "Un medicamento como la mesalazina cuesta casi 300.000 pesos por 60, lo que resulta inalcanzable para muchos", reflexionó al sugerir que el Estado debe garantizar la competencia y fomentar la producción de medicamentos esenciales.
Finalmente, Rosas concluyó que “la industria farmacéutica argentina tiene la capacidad de abastecer el mercado, pero hay que preguntarse por qué existe tal diferencia de precios y qué medidas pueden implementarse para reducirla”. La lucha por precios más justos continúa, mientras los consumidores esperan soluciones efectivas que garanticen su acceso a medicamentos necesarios.