Luego de quedar fuera de la Copa Libertadores River tenía que dar una muestra de carácter, su rival Banfield de un flojo presente no fue escollo para ganar por 3 a 1 y soñar con entrar en el certamen sudamericano del año próximo
Desde el inicio, la superioridad del equipo de Marcelo Gallardo fue clara, pero la falta de contundencia y claridad para resolver las situaciones de peligro hacían que el encuentro se mantenga igualado. De todas maneras, algunos errores defensivos y jugadas de contra impedían que el Millonario pueda relajarse, ante un Banfield que esperaba agazapado.
Aún así, el gol para el conjunto local llegó a los 41 minutos de la primera mitad, cuando Pablo Solari recibió una pelota en el borde del área y, con un gran control, sacó un remate de media vuelta que se coló en el ángulo superior izquierdo del arco de Facundo Sanguinetti. Así, el cordobés no sólo adelantó a su equipo, sino que además rompió una racha negativa de más de 300 minutos sin poder marcar un gol.
El complemento comenzó de la misma manera en la que terminó la primera mitad. Es que, apenas después del saque del medio, Solari ganó una pelota sobre el costado derecho del mediocampo, jugó con Claudio Echeverri por el centro y fue a buscar la devolución, para luego rematar y marcar su segundo gol de la tarde, segundos antes de que se cumpla el primer minuto de la segunda parte.
Encendido por los goles, el Millonario tuvo sus mejores minutos del partido y pudo haber ampliado la diferencia. Primero, con un remate de tres dedos de Facundo Colidio que intentó sorprender a Sanguinetti. Después, con una picadita de Echeverri que intentó lo mismo, pero se fue alta. De esta manera, River parecía encaminarse hacia la goleada y Banfield no lograba hacer pie.
Sin embargo, con el correr de los minutos el trámite se emparejó y el Taladro tuvo la chance de descontar, después de una gran contra de Gerónimo Rivera que finalizó con un centro atrás para Ignacio Rodríguez, pero el remate de éste último no pudo vencer a Franco Armani.
A los 23 minutos, la primera polémica. Rivera cayó derribado en el área y reclamó una infracción de Maxi Meza, algo que el árbitro Sebastián Martínez primero no cobró y luego fue a revisar al VAR. Sin embargo, pese a las quejas de Gustavo Munúa, entrenador del conjunto visitante, el juez no cobró la pena máxima. De todas maneras, 12 minutos después, una falta de Adam Bareiro sobre Agustín Obando terminaría en un penal para el conjunto de Munúa, a pesar de que Martínez primero cobró tiro libre, algo que el VAR corrigió. Allí, Leandro Garate se hizo cargo del remate y, tras convertirlo en gol, le metió suspenso al encuentro.
El Taladro pareció ganar vida tras el gol y el encuentro se puso complicado para River. Sin embargo, ya sobre el tiempo de descuento, Miguel Borja se encontró con una pelota tras un intento de Gonzalo Martínez y, con un fuerte remate, le rompió el arco a Sanguinetti para marcar el 3-1 y festejarlo con toda la bronca, sobre todo después de haber sido silbado al momento de las formaciones.