La Casa Rosada confirmó ayer que Cristina Kirchner participará del tedeum por el 25 de Mayo que se realizará en la basílica de Luján, y de esta manera la Presidenta no concurrirá a la misa tradicional que se realizará en la Catedral de Buenos Aires.
 
Desde 2005, por las diferencias que tenían el ex presidente Néstor Kirchner y el entonces arzobispo metropolitano y actual papa Francisco, Jorge Bergoglio, el Gobierno decidió no concurrir al tedeum que se realiza todos los años en la Catedral de Buenos Aires.
 
Según detallaron fuentes oficiales, la decisión de que Cristina Kirchner vaya al tedeum de Luján y no al de la Capital ya estaba definida con el arzobispo Agustín Radrizzani desde antes de la designación del papa Francisco. El Gobierno se preocupó ayer en despegar la decisión presidencial de una tirante relación con la Iglesia y argumentó que el lugar fue incluso acordado con el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, designado por el Papa su sucesor tras su mudanza al Vaticano.
 
En rigor, Poli encabezará en la Catedral de Buenos Aires el tradicional tedeum sin la presencia de Cristina Kirchner, y la Iglesia ya invitó para ello a funcionarios del gobierno porteño. Fuentes calificadas de la Iglesia destacaron que "nunca se evaluó la posibilidad de que el tedeum de la Catedral se suspenda o no se realice" por la ausencia de la jefa del Estado.
 
La Presidenta ya había participado del tedeum en Luján hace tres años, en el festejo del Bicentenario del 25 de Mayo de 2010.
 
Además, la Casa Rosada trabaja en estos días en la celebración de los 10 años de la llegada del kirchnerismo al poder. Después de la ceremonia religiosa habrá una manifestación de apoyo al Gobierno en la Plaza de Mayo, que las organizaciones sociales y políticas que apoyan al Gobierno bautizaron el "Cristinazo". Aspiran a movilizar más de medio millón de personas para el acto que cerrará Cristina Kirchner con un discurso hacia la militancia, que girará sobre el eslogan "La década ganada".
 
La Presidenta llevará a la basílica de Luján una de las banderas argentinas que flamearon en las islas Malvinas en 1966 y un pesebre donado por el Vaticano, que se expuso a fin de año en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada.
 
En buen romance con la Iglesia tras la designación del papa Francisco, ayer en Balcarce 50 confiaron que el año próximo la Presidenta podría volver a presenciar el tedeum de la Catedral metropolitana. "No irá este año porque la Presidenta ya se había comprometido con Radrizzani", sostuvo un funcionario.
 
La jefa del Estado estuvo la semana pasada con el arzobispo de Mercedes-Luján en la Casa Rosada, donde recibió de manos de Radrizzani una imagen de la virgen de Luján que le regaló al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en su visita al país y que el mandatario colocó en la capilla del mausoleo de Hugo Chávez en Caracas.
 
Para no provocar roces, la Presidenta habló en persona con Poli para comunicarle su decisión de no ir al tedeum porteño.
 
Fuente: La Nación