La fibra es identificada como la parte no digerible de los alimentos de origen vegetal
porque tiene una estructura muy particular que hace que las enzimas de nuestro organismo no sean capaces de digerirlas, señala la licenciada.
 
Existen diversos tipos de fibras, incluirlas en una dieta hace que el colesterol se reduzca,  regula la absorción de los hidratos de carbono en el organismo, dan saciedad, disminuyen el tiempo del tránsito intestinal y evitan la obesidad entre otros.
 
“Para que las fibras puedan cumplir su función, es fundamental consumirlas con agua, porque si ella la fibra no ejerce su función” indica Mercedes.
 
Podemos encontrar fibras en: las frutas y sus jugos, las cáscaras de frutas como manzana, pera o durazno, cereales integrales, pan negro, granos enteros, semillas y frutas secas. También lentejas, soja y garbanzos.


 
Respecto a una temática muy vigente como la delgadez y la obsesión de hombres y mujeres por las dietas, la doctora recomienda ingerir mínimo 6 comidas diarias, para mantener el metabolismo activo y no llegar a las comidas con tanto apetito. Además ingerir mucha agua, frutas y verduras de todo tipo y color y una porción diaria de carne.


 
Respecto al desayuno, algo fundamental para arrancar el día, dijo que el aporte energético es esencial. Un desayuno saludable consta de: un vaso de jugo de naranja, tostadas de pan integral con queso crema o mermelada Light y alguna infusión como te o mate cocido con leche descremada y edulcorante. Las colaciones de media mañana o media tarde son una alternativa efectiva para cubrir momentos de hambre.
 
 Fuente:Informe16-StaffLV16