El Millonario venció por 2-1 a Independiente, con goles de Iturbe y Lanzini, y alcanzó en la punta a Newell´s, que tiene que jugar con Unión. Independiente, que descontó con Montenegro
River venció a Independiente por 2-1 en el Monumental y alcanzó en la punta a Newell´s, que jugará contra el descendido Unión; por su parte, el Rojo dio un paso más hacia el Nacional B, y la pérdida de categoría podría concretarse mañana si Argentinos vence a San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro.
En un primer tiempo muy parejo, el Millonario marcó la diferencia con un tanto de Iturbe, la figura del partido: el delantero se encontró con una asistencia fortuita de Funes Mori y definió abajo y al lado del palo, inalcanzable para Rodríguez. Antes, el Rojo había tenido un cabezazo de Fredes que terminó en las manos de Barovero.
En desventaja, el Rojo buscó reaccionar con más ímpetu que fútbol, y si bien no llegó al arco rival con claridad, pudo inquietar a Barovero con remates desde media distancia. Primero fue Miranda, con un balón que terminó en el córner, y luego fue Fernández, con un tiro apenas desviado.
En el segundo tiempo, el juego perdió intensidad. River esperó agazapado la oportunidad de concretar un contraataque, situación que encontró a los 17 minutos con una escalada veloz de Iturbe y un pase atrás para Lanzini, que la clavó en el ángulo.
Con el 2-0, un pequeño grupo de hinchas del Rojo rompió el alambrado y comenzó a revolear las butacas a la platea del Millonario. Dentro del campo, la impotencia de los jugadores se convirtió en lágrimas. Un tiro libre de Montenegro rozó el ángulo, y con tiempo cumplido el Rolfi tuvo su revancha con un derechazo que se clavó en el palo derecho de Barovero. Igualmente, no hubo lugar para el milagro: Independiente dio otro paso hacia el infierno.