Pamela David dejó la conducción para dar a luz a su hija Lola, fruto de su relación con el empresario Daniel Vila. Pero ahora que la nena ya tiene 9 meses, la modelo y conductora está dispuesta a volver a ocupar su lugar en Desayuno Americano, dado que Ernestina Pais (su reemplazante) renunció antes de tiempo por sufrir constantes ataques de pánico que le impedían hacer su trabajo.

"La tele me da miedo, está muy brava… pero a la vez la amo", destacó Pamela, quien volverá a conducir Desayuno Americano a partir de mediados de julio.

En diálogo con la revista Gente, la morocha, de 34 años, reveló que está estudiando periodismo para perfeccionarse en su rol de entrevistadora: "Me gusta, es un curso corto pero intensivo. Lo tenía como asignatura pendiente".

"La reina es Mirtha (Legrand). Me encanta como conductora y entrevistadora", aseguró la modelo, quien sorprendió al afirmar que prefiere la televisión de ahora, sin Marcelo Tinelli: "Me gusta que Tinelli no esté en la pantalla. Daba trabajo, pero perjudicaba el contenido de los programas de casi toda la tele: nadie se ponía a generar. Hoy nos vemos obligados a crear, y eso me gusta".

Sobre su impactante figura, a poco tiempo de haber sido mamá, dijo que aún no recuperó su peso: "No me siento sexy. Hoy existe en mí cierta inseguridad. Puedo jugar a la sexy. Coquetear era parte de mi personalidad… Presumir… Bien de libriana… Pero cuando me sienta firme, en el sentido literal de la palabra, já! ¡regresaré!".

"Ahora en la balanza pesa mucho más la familia", comentó y confesó que si bien le da gracia que la llamen "la dueña" por su relación con Daniel Vila (dueño del canal América), también le duele: "Me da gracia y a la vez me parece medio hiriente, porque de ninguna manera uno hace lo que quiere, hay una producción detrás".

"Me encuentro en una de las etapas más felices de mi vida y no me da miedo perderla. Estamos como novios con Daniel, todo el día juntos, cada vez más enamorados", finalizó.