Un ex prisionero sirio de Guantánamo llegó a la Argentina para pedir asilo para otros detenidos de esa base estadounidense.

Jihad Ahmad Diyab, refugiado en Uruguay, viajó al país para pedir "ayuda humanitaria" para sus ex compañeros, que siguen en el centro de detención acusados por terrorismo. "Vine acá para luchar", dijo en una entrevista con algunos medios locales. Vestido con el traje naranja que usó durante los 12 años y cuatro meses en los que estuvo encerrado en la prisión de Guantánamo, Jihad Ahmad Diyab es uno de los seis presos que fueron liberados en diciembre último y recibidos por Uruguay por una decisión del presidente José "Pepe" Mujica que todavía genera polémica en su país.

"Yo antes de salir de Guantánamo estaba en un lugar donde tenía la comida forzada. Es un tubo que pasaba por la nariz para forzarme a comer. Ahí hablé con un compañero de Yemen que me dijo: «Cuando salgas, no nos olvides». Y bueno, yo me emocioné mucho, nunca voy a olvidar los compañeros que están allá y por eso es que vine para acá, para luchar", dijo Diyab en diálogo con Barricada TV, Radio Madre (de las Madres de Plaza de Mayo), Resumen Latinoamericano y Radio Gráfica.

"Nunca voy a olvidar a los compañeros que están allá, y por eso es que vine para acá para luchar. Por ejemplo, el gobierno argentino puede recibir presos de Guantánamo acá de forma humanitaria", agregó el sirio.

Además, explicó por qué los prisioneros no vuelven a sus países de origen. "En Siria la situación no está estable, nadie vuelve a Siria ahora. El gobierno estadounidense rechazó que Túnez reciba al tunecino y en Palestina, ustedes saben, no hay posibilidad", manifestó.

Durante la entrevista, Diyab habló en árabe con la traducción al español de un tunecino que reside en la Argentina. El ex prisionero señaló además que decidió hacer la entrevista con el uniforme naranja porque considera esa ropa parte de él. "Antes de salir me dijeron que me cambiara y me vistiera con un traje marrón. Yo me lo puse encima de éste porque es simbólico y muy importante para mí. Los estadounidenses usaban este uniforme para aterrorizar al mundo entero. Y gracias a Dios se dio vuelta eso", dijo.

En este sentido, el ex preso sirio exhortó a los estadounidenses a cambiar su visión sobre los detenidos de la cárcel que se encuentra en territorio cubano. "Me gustaría decirle al pueblo estadounidense que les presentaron a los presos de Guantánamo como combatientes enemigos que nosotros fuimos detenidos en nuestras casas", sostuvo.

Según retrataron los medios de Uruguay, el ex detenido viajó a la Argentina el domingo 8 de febrero acompañado por una periodista local, activista de derechos humanos y defensora de la causa Palestina y ya regresó a Uruguay.

Nacido en El Líbano, pero residente sirio desde los tres años, Diyab tiene 43 años y tenía cuatro hijos, pero uno murió en la guerra, según contó en diciembre el diario El País. Hoy su familia está en Turquía, pero vivió en Siria, emigró a Afganistán y en agosto de 2001 se instaló en Paquistán. Ahí fue detenido y acusado de integrar células terroristas de Al Qaeda. "No había pruebas ni se presentaron cargos en su contra. En 2009 el gobierno norteamericano aceptó su liberación, pero debió esperar otros tres años para abandonar la cárcel", precisó el periódico uruguayo.

En Guantánamo, estuvo casi dos años en huelga de hambre y varios meses de forma ininterrumpida, hasta que un juez obligó a que lo alimentaran por la fuerza. Ante esta situación, los guardias aplicaron una técnica para que comiera a través de una sonda que duraba unas diez horas por día.

Por el momento no hubo ningún pronunciamiento oficial del gobierno argentino respecto del pedido de asilo presentado.

En noviembre pasado, el Ministerio del Interior firmó el Programa Siria, que contempla facilidades de visado humanitario para todas aquellas personas afectadas por el conflicto armado sirio que quieran solicitar refugio en la Argentina, en el marco de las políticas de protección de derechos humanos que promueve Cristina Kirchner. Desde que estalló la guerra en Siria llegaron 174 refugiados a la Argentina, aunque éstos serían más.

Respecto del pedido del presidente norteamericano, Barack Obama, a países de la región para trasladar a presos de la cárcel especial de Guantánamo, la Argentina nunca emitió ninguna declaración de apertura respecto de la posible recepción de los detenidos en la base militar norteamericana.(LANACION)