Hoy pasado el mediodía se publicará el informe USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos) mensual de producción y consumo.
Todos los operadores tienen los ojos puestos en el informe esperando alguna noticia que sea capaz de mejorar las cotizaciones de los granos, sin embargo los abultados stocks y la proximidad del informe de superficies publicado el 31 de marzo anticipan que los cambios serán efímeros, de corto plazo y solo provocado por los fondos de inversión que desarmarán posiciones que previo a la publicación de estos informe considerados claves para el mercado siempre ocurre.
El factor clave es en cuanto diferirán las estimaciones de consultoras privadas con las cifras que hoy muestre el informe. Las esperanzas están puestas en una reducción de los stocks de soja, convalidando lo dicho por el organismo en el informe de fines del pasado mes.
Lamentablemente las demasiadas condiciones macroeconómicas que no ayudan para pensar en una rápida recuperación, la tecnología acompañada de buen clima ayudo para recomponer los stocks evitando así sobresaltos en los demandantes que saben que solo es cuestión de tiempo para que se generalice la oferta del hemisferio sur. Si los precios suben será un ajuste, toma de ganancias, reacomodamiento de posiciones de los fondos; el nombre no es lo importante, si hay un movimiento será de corto plazo e insuficiente para provocar un cambio de tendencia.
En definitiva solo los fondos de inversión, con estos niveles de reservas de los principales granos, son lo que pueden provocar variaciones si se alejan los números del USDA de las estimaciones previas de las consultoras privadas.
Mientras que todo parece ser una mala noticia, dependerá de la capacidad del hombre de campo para transformarla en una oportunidad para mejorar sus ventas. Si los precios bajan pueden comprar calls (opciones de compra) que lo pueden beneficiar en futuras subas, y si suben aprovechar los mejores precios para realizar las ventas.
Todo parece indicar que de no mediar problemas con las condiciones del tiempo en el hemisferio norte, no tendremos una recuperación definitiva de los precios de los granos, por lo que es prioritario mantenerse informado para aprovechar estos pequeños movimientos.
Un párrafo aparte será el comportamiento del hombre de campo en Argentina, que en general hoy se encuentra con una muy buena cosecha, pero con bajos precios y frente a un cambio de gobierno donde las propuestas de los candidatos se circunscriben en eliminación de roes, baja o quita en las retenciones y una devaluación obligada existe una alta probabilidad que en la medida que sus presupuestos financieros lo permitan se quedará con el mayor porcentaje posible de su producción, obligando a las fábricas a resignar margen de molienda para no entrar en paro y demorando la entrada de la oferta argentina en el contexto mundial. Si el porcentaje de retención es elevado, sumado a que Estados Unidos ya exporto toda la soja que tenía planificada y la devaluación del real ayudo para que se incrementen las ventas de Brasil, existe una pequeña luz de esperanza en el precio de la oleaginosa. Seriamos demasiado optimistas en esperar grandes cambios, pero las pequeñas variaciones en grandes producciones ayudan al menos a equilibrar los Estados de Resultados de las empresas agropecuarias.