El Servicio Secreto de Estados Unidos interrumpió este martes la conferencia de prensa diaria del portavoz de la Casa Blanca para evacuar la sala de prensa y uno de los jardines de la residencia presidencial, a raíz de una amenaza de bomba.

Los periodistas que participaban de la conferencia de prensa matutina y personal del lugar debieron ser escoltados al exterior del edificio mientras se realizaba la inspección.

Las transmisiones de la televisión en vivo no fueron interrumpidas, por lo que los espectadores vieron de modo instantáneo cómo un instructor de la unidad canina del Servicio Secreto revisaba con su perro las filas de sillas vacías en la sala de prensa.

En tanto, un edificio próximo al complejo del Congreso estadounidense también debió ser evacuado en los instantes previos, ante la recepción de una llamada telefónica anónima sobre una presunta bomba.