Un tren de alta velocidad que estaba realizando una prueba se descarriló el sábado en el norte de Francia matando a por lo menos siete personas y dejando 11 heridos.

El tren estalló en llamas, se partió y cayó al canal Marne au Rhin.

Viviane Chevallier, portavoz del gobierno en Bas-Rhin, dijo que por el momento no había indicios de que se trate de algo relacionado con los ataques terroristas en París el viernes.

Agregó que las autoridades creen que el tren de TGV que transportaba 49 personas iba demasiado rápido y se salió de las vías en el pueblo de Eckwerscheim, cerca de la frontera con Alemania.

Cinco helicópteros fueron enviados para trasladar a los heridos al hospital en la ciudad de Estrasburgo, cerca de ahí. Dos ministros del gobierno francés iban camino al lugar del descarrilamiento.

En principio nada apunta a una vinculación con una acción terrorista, tras los atentados que dejaron al menos 127 muertos en París, precisaron las fuentes al rotativo.

El tren, dijo una fuente de la prefectura de Alsacia al diario "L'Alsace", llevaba a bordo técnicos y descarriló "a causa de una velocidad excesiva".

Varios heridos tuvieron que ser trasladados a los hospitales en helicóptero, agregaron las fuentes.