El Sumo Pontífice se reunió con la Presidenta tras el cierre de la Jornada Mundial de la Juventud. "Miren lo que me regaló el papa Francisco para Néstor Iván", contó la jefa de Estado.
Iba a ser un encuentro. Un momento que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner esperaba para volver a verse con el papa Francisco en el cierre de la Jornada Mundial de la Juventud pero el Sumo Pontífice la sorprendió con un regalo especial: un par de escarpines y medias blancas para su nieto, el primero en la familia Kirchner.
"Miren lo que me regaló el papa Francisco para Néstor Iván", exhibió entusiasmada la mandataria a los periodistas. Los regalos fueron entregados por el Papa durante un breve saludo tras la misa multitudinaria que celebró en Copacabana. Además, del regalo el Papa le "bendijo unos rosarios".
Los escarpines y las medias blancas para su nieto no son los primeros regalos que le hace el Sumo Pontífice. En marzo, cuando la mandataria se reunió con Francisco en el Vaticano, tras su elección como Papa, le obsequió el documento con las conclusiones de la Conferencia del Consejo Episcopal latinoamericano de 2007; una mayólica que replica la placa con la imagen de la Plaza San Pedro en la que figuran los nombres de Cristina Kirchner, Michele Bachelet y el entonces papa Benedicto XVI, cuando celebraron en Roma los 30 años de la mediación de Juan Pablo II en el diferendo limítrofe con Chile por el canal de Beagle; y una rosa blanca, que simboliza la devoción que el Papa tiene por Santa Teresita.
Fernández de Kirchner fue a Brasil como invitada para participar en la Jornada. No viajó sola, lo hizo junto a miembros de su Gabinete y varios curas villeros, además del intendente de Lomas de Zamora y primer candidato a diputado nacional por el Frente de la Victoria, Martín Insaurralde.