En lo que va del año, es el segundo abrazo que los empleados del hospital junto con la ciudadanía hacen al Hospital San Antonio de Padua ante la falta de respuestas del gobierno de la provincia. “Es para visibilizar los que nos está pasando. Es un ataque brutal a la clase trabajadora, no solamente con los despidos sino también con los salarios que están por debajo de la canasta básica”, dijo Valentina Noroña, integrante del establecimiento.

Además, manifestó que en la protesta incluyen el desacuerdo a las últimas medidas del Gobernador con respecto a la Caja de Jubilaciones. “Decimos no a la armonización de la Caja de Jubilaciones”.

Después del primer abrazo que fue en el mes de marzo, no hubo más respuestas de parte del Estado. “Al contrario ya son 60 los despedidos en salud en toda la Provincia”.

A raíz de la situación y para solventar la falta de profesionales, en Río Cuarto el hospital ha cerrado camas, clínica médica, cirugía en general y cinco camas en la terapia intensiva de adultos. “Realmente grave muy grave”, lamentó Noroña.

De acuerdo a la presencia de algunas organizaciones gremiales, y funcionarios locales como provinciales, la integrante del nosocomio reclamó la ausencia de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina, “nunca participaron de las asambleas tampoco” y dijo “creemos que había que invitar a todas las organizaciones”.

Finalmente antes los dichos del legislador Miranda quien habló sobre una dispersión gremial que hay en el sector, la mujer manifestó: “creo que es embarrar la cancha. Toda la población y los trabajadores saben quien dice la verdad. La población es quien viene al hospital y lo padece”.

Por otra parte, los concejales de la oposición también participaron de la protesta en el Hospital.
 
El presidente del bloque de concejales de Cambiemos, Carlos Ordóñez, cuestionó a la Provincia por los despidos y la falta de insumos y personal para cubrir la demanda de la población.“Estas problemáticas son muchas y no son nuevas, son reclamos que se vienen reiterando”, agregó.
 
Por su parte, Pablo Carrizo, concejal de Respeto, se solidarizó con sus ex compañeros cesanteados por el gobierno de Juan Schiaretti.“Yo estoy en la misma situación que mis compañeros soy un contratado más”.
 
Carrizo dijo que hay versiones que señalan que se cerrarían algunas áreas del Hospital, al margen del cierre de algunas camas.
 
En tanto, la secretaria general de ATSA y concejal del Unión por Córdoba, Cristina Fernández, lamentó que haya precarierdad laboral en todos los ámbitos del Estado.
 
Fernández señaló que el Estado debería dar ejemplo en la contratación de personal y se debería volver a la estabilidad para el empleado público.
 

Informe16