Familiares de víctimas de asesinatos y vecinos que sufrieron diferentes delitos, se reunieron este martes frente al Congreso para pedir mayor seguridad y justicia. Los constantes hechos de inseguridad que suceden en el país motivaron la convocatoria que se realizó en el centro porteño.

Bajo la consigna #ParaQueNoTePase, miles de personas reclamaron por los crímenes en ocasión de robo, femicidios, asaltos, asesinatos y distintos hechos que atentaron contra la seguridad de los ciudadanos.

De la marcha participaron víctimas de casos que tuvieron repercusión pública. Estuvieron presente Carolina Píparo (víctima de una salidera bancaria cuando estaba embarazada), Jimena Aduriz (madre de Ángelez Rawson, asesinada por el portero del edificio donde vivía), Matías Bagnato (su casa fue incendiada hace 22 años y provocó la muerte de sus padres en el barrio de Flores), María Luján Rey (madre de Lucas Menghini, víctima de la Tragedia de Once), y Gladys Cabezas (hermana del fotógrafo José Luis Cabezas).



También estuvieron presentes familiares de las tragedias de Once y Cromañon, periodistas y organizaciones sociales. Padres, madres, hijos, hermanos, esposas y amigos de las víctimas de la inseguridad renovaron el pedido de justicia y reclamaron una mayor protección del Estado.

Pese a la diferencia de los casos, todos tuvieron un denominador común: era muertes evitables. Así lo hicieron saber los que participaron de la convocatoria. Los organizadores del evento decidieron que los oradores del acto fueran los periodistas Luis Novaresio y Lorena Maciel. No quisieron que ninguna víctima se distinguiera porque aseguraron que "es un reclamo de todos" para exigir medias de prevención y control.

Ambos periodistas leyeron un documento, redactado por los familiares, en el que pidieron que se conforme un registro de víctimas y hechos que quedaron impunes. También que haya una asistencia legal a la víctima y que las penas a los culpables sean de cumplimiento efectivo.

"Esperamos ser convocados a partir de mañana", afirmó Carolina Píparo, una de las organizadoras de la marcha. Y agregó: "le decimos basta a una forma de vivir que naturalizamos". Vivian Perrone, madre de Kevin Sedano, que murió atropellado por un auto en mayo de 2002, les pidió a los dirigentes políticos que los escuchen. "La gente está cansada", exclamó.



"¿Cuántos muertos va a haber? Nos vamos a quedar sin gente", sostuvo la madre de Diego Rodas, asesinado en Ituzaingó hace un mes cuando salía de la casa de su suegro. "Estamos cansados de los anuncios, queremos medidas concretas", pidió la hermana de Alex Ayala, asesinado en la puerta de su casa en el 2012. Voces llenas de dolor que se hicieron escuchar en el atardecer de este martes.

Cientos de familiares pidieron justicia, acompañamiento del Estado, avance en las causas judiciales, castigos severos para los asesinados de las víctimas y mayor seguridad para prevenir los delitos. Un pedido masivo que se replicó en las redes sociales y en los medios de comunicación. "Qué no te pase", fue el grito que se repitió.

El respaldo del Gobierno a la marcha

La marcha contó con el respaldo del Gobierno. El ministro de Justicia, Germán Garavano, aseguró antes de la convocatoria que la manifestación tenía el objetivo de que "todos tomemos conciencia: los jueces, los fiscales, los diputados, los funcionarios y la gente en general".

Pocas horas antes de la convocatoria, el presidente Mauricio Macri pidió "una justicia fuerte, independiente, transparente y moderna". De esa forma, apoyó el reclamo contra la inseguridad y la justicia que realizaron las miles de personas que se concentraron frente al Congreso.