Eso se desprende de la resolución de la causa Río Tercero por la cual el expresidente quedó procesado.
El juez federal de Río Cuarto, Carlos Ochoa, procesó al expresidenteCarlos Menem por las explosiones de la fábrica militar de Río Tercero al considerarlo supuesto "instigador " de estrago culposo para encubrir el tráfico de armas a Croacia y Ecuador.
"Dicho de otra manera, (...) en su carácter de máxima autoridad del país y participe en los hechos, podría haber determinado a quienes, con él pergeñaron el tráfico ilegal de armas para que eliminen todo tipo de rastros de esa operación delictiva tendiente a evitar que, en el futuro, se le pudiere endilgar intervención alguna en los mismos", señaló el magistrado en el procesamiento, cuyo contenido se difundió hoy en el Centro de Información Judicial.
- Resolución completa
Lo principal de la resolución
"Las pruebas colectadas en esta causa, permiten claramente inferir, por existir un hilo conductor, que lo que ocurriera antes y, especialmente con la explosión, eran producto de decisiones adoptadas desde el poder central, desde donde se impartieron las órdenes del acto criminal", se indicó.
"Es decir que, las decisiones de lo que se llevara a cabo en Río Tercero, eran tomadas por los funcionarios que tenían bajo su órbita el manejo de la Fábrica Militar y de todos aquellos que pudieren resultar responsables por el contrabando de armas que a la fecha del estrago llevaba apenas unos meses de investigación".
"No puede, a esta altura de los acontecimientos negarse que la maniobra de la venta ilegal de material bélico no concluyo con el contrabando que ha sido debidamente probado, sino que, precisamente a raíz de haber quedado al descubierto dichas maniobras delictivas, se hubieron llevado a cabo otras actividades que terminaron con la desgraciada explosión de la Fábrica Militar de Río tercero, con el espurio objeto de borrar cualquier rastro que pudiera vincular a ningún funcionario con el mentado contrabando".
Sarlenga. "Otro dato no menor es que se acreditó en aquella causa y también en ésta que Menem mantuvo en su cargo al Interventor de la DGFM Luis Sarlenga ante la tentativa de remoción por parte del Ministro de Defensa Héctor Oscar Camilión designado el 5/4/93 en reemplazo del saliente Erman González, conforme se desprende de los dichos vertidos por el propio exinterventor de la DGFM".
"La orden de eliminar todo tipo de prueba incriminatoria, habría bajado por los canales pertinentes a quienes integraban la D.G.F.M. y del mismo modo a la rígida formación militar y a quienes ocuparan cargos en la misma y F.M.R.T., cuyos miembros se debían al poder político del presidente".
Otros considerandos
"La Fábrica Militar de Río Tercero, tuvo un rol protagónico en el tráfico ilegal de armas, municiones y pólvora en la argentina, entre los años 1991 y 1995; ello conforme a la amplia prueba receptada en oportunidad de investigar la causa; la que determina que operó como centro de almacenamiento y distribución de pertrechos que salieron clandestinamente del país rumbo a Ecuador y Croacia".
"La flexibilidad absoluta de controles, especialmente el día y hora del suceso (03-11-95), el ingreso de material bélico que se camuflaba con pintadas de otros países y el faltante de material bélico que se ha visto corroborado con pericias técnicas, los movimientos de vehículos que ingresaban y egresaban sin especificación de destinos, cargas y descargas de material sin el debido registro contable, demuestran acabadamente que el centro operativo de maniobras ilegales de tráfico, era la F.M.R.T."
"Partieron innumerable cantidad de camiones con contenedores cuyo destino final era el puerto de Buenos Aires, circunstancia no desconocida por la Dirección General de Fabricaciones Militares, especialmente por los encargados de Producción Militar y Comercialización, Coroneles Franke y González de la Vega. Circunstancias estas que por su trascendencia en modo alguno eran desconocidas por el poder político de turno, encabezado en esa época por el imputado Menem".