La vicepresidenta de la Argentina, Gabriela Michetti, salió a defender a la luz pública el decreto del presidente Mauricio Macri sobre la inclusión de familiares de funcionarios públicos en el denominado sinceramiento fiscal pese a que deslizó cierta distancia entre su postura política y su postura personal al respecto.

"No creo que esté mal porque no es que se incluye a los familiares sin ninguna condición", dijo Michetti en el programa Animales Políticos, conducido por Jonathan Viale en Radio La Red. "El espíritu de la ley es que si hay un familiar que tiene bienes (no declarados) que son adquiridos antes de la función pública, te diría que es casi inconstitucional que se le niegue a esa persona la posibilidad de blanquear por ser familiar de un funcionario. En ese sentido, me parece que es correcto, que es justo", explicó la vicepresidenta.

Así y todo, luego de que el periodista indagara con firmeza sobre su opinión personal al respecto, Michetti respondió: "Yo soy parte del Gobierno y si se toma una medida de este tipo, voy a defenderla. No voy a decir lo que a mí me parece".

En tanto, uno de los pilares del gobierno nacional reconoció que la recuperación económica del país está más atrasada de lo que se pensó en un primer momento: "Nos dimos cuenta de que la situación en la que la economía estaba era un poco peor de lo que se pensaba y la crisis era más profunda", afirmó.



Y añadió: "Estamos desde hace 12 meses piloteando una crisis que no es una crisis liviana, es una crisis profunda y que tiene que ver con problemática social enorme. Nosotros venimos con la problemática de un país que no crece desde hace cinco años, que no genera un solo empleo privado, que estuvo todo el tiempo con una ficción económica producto de la emisión monetaria y obviamente se derrumba a pedazos cuando las divisas del país empiezan a ser menores porque los precios de las commodities bajan porque China compra menos".

En tanto, Michetti aseguró que la organización que preside, la Fundación SUMA, entregó todos los papeles y se puso al día respecto a la investigación sobre los 234.500 pesos y 50.000 dólares robados en su casa el 22 de noviembre de 2015.

"Hemos entregado todos los papeles a la Justicia y rápidamente construimos la prueba necesaria para demostrar que era todo un disparate", aseguró, y prosiguió: "Si uno es imputado en una causa en la que hay un delito y en definitiva se ha cometido un delito y te imputan a vos, pero no tenés nada que ver con eso, pudo haber una confusión con el autor. Pero en este caso ni siquiera hay un delito, ni fallas administrativas. Es complicado ver eso porque una se da cuenta hasta qué punto tenemos una profunda crisis institucional como para que se pueda generar semejante mentira".