Roshan Achal, autor principal del estudio, mencionó que se trata de un método basado en átomos de hidrógeno usando "un procedimiento litográfico y de repasivación de hidrógeno", con lo que la escritura y reescritura de datos sería posible en estos átomos.
El problema es la velocidad de lectura y escritura
Según explica Achal, "este método permite eliminar rápidamente los átomos para escribir información, y posteriormente volver a escribir nuevos datos de una forma sencilla". La principal ventaja de esto es que, aseguran, el experimento se realizó en condiciones "del mundo real", es decir, nada de condiciones especiales, temperatura u otros factores.
Las pruebas se realizaron aplicando una capa de átomos de hidrógeno a un chip de silicio de aproximadamente una pulgada cuadrada (2,54 cm), donde lograron almacenar 138TB de información. Para poner en perspectiva esto, los actuales discos duros de 10TB tienen una capacidad de aproximadamente 512GB por pulgada cuadrada. Pero además, mencionan que lograron borrar y reescribir todos los datos usando el mismo método.
Roshan Achal.
A pesar de todas estas bondades, hay algunos inconvenientes al usar este método, ya que en primer lugar deben idear un formato para poder ofrecerlo de forma comercial, ya que tendría que ser una unidad compatible con los actuales sistemas. Pero el que sin duda es el problema más grave es la velocidad de lectura y escritura, ya que durante las pruebas tardaron entre 10 y 15 minutos en grabar una sola canción.
Los responsables de este proyecto no tienen planes de crear un dispositivo comercial, pero creen que es un gran avance que podría ayudar al futuro del almacenamiento, por lo que están abiertos a trabajar con compañías interesadas u otros investigadores.